El próximo presidente de la Generalitat Valenciana presentó ayer su cara más transparente con los medios de comunicación tras criticar a Ximo Puig por los problemas que había para poder hablar con él. Tras media hora de ‘canutazo’ (declaraciones de pie, en vez de sentado en rueda de prensa), se vino arriba rodeado de un par de decenas de periodistas. “¿Esto es un corrillo, no? Es decir, sin cámaras”, comentó el todavía presidente de la Diputación de Alicante en funciones. Pasados varios minutos, su equipo de comunicación intentó cortar pero dijo: “No necesito que nadie me rescate”. Horas después de anunciar el acuerdo con Vox que le acerca ya a la presidencia de la Generalitat, Carlos Mazón escenificó y ejecutó una relación cordial en la que cumplió con su promesa de contestar “a todas las preguntas que queráis”. Ahora toca mantener el listón donde lo ha puesto.