JP Morgan liquida su negocio portuario en España por 300 millones
El 29 de septiembre se acabará el negocio portuario de JP Morgan en España. Tal y como han explicado a Economía Digital, la venta del 49% de Cosco Shipping Ports Spain Terminals a la naviera francesa CMA CGM se firmará en notaria por 300 millones de euros este viernes. «La operación le genera a JP Morgan una importante plusvalía. Su inversión en los puertos españoles ha sido claramente lucrativa», aseguran las fuentes portuarias valencianas que desvelan la transacción a este periódico.
La operación supone la venta del 49% de la principal terminal portuaria de Valencia y el 38% que el banco de inversión tenía en el puerto de Bilbao. «Con esta operación, se acaba la presencia de JP Morgan los puertos españoles», explican las fuentes consultadas.
El origen de la posición del banco de inversión en los puertos españoles se remonta a 2010, cuando compró la división de puertos de ACS, Dragados-SPL, por un importe del entorno de los 700 millones de euros. En 2017, JP Morgan vendió el control de esta inversión al gigante Cosco, es decir, el 51% de la terminal valenciana pasó a manos chinas.
En aquella operación también se incluyó participaciones en las terminales de contenedores de Noatum Ports en Bilbao y los Puertos Secos de Madrid (Conterail) y Zaragoza (Noatum Rail Terminal Zaragoza). Entonces, la sociedad se llamaba CSP Iberian Terminal Valencia.
El principal activo de esta operación es la terminal del puerto de Valencia, que tiene una línea de atraque de 2,3 kilómetros, es decir, un espacio superior al que ocupan avenidas en Valencia como Fernando el Católico, Pérez Galdós, Peris y Valero o Marqués del Turia. Junto al espacio para la carga y descarga de contenedores hay 145 hectáreas de patio, un espacio que es 10 veces más grande que el Parque Central de Madrid Nuevo Norte y un 22% más grande que el parque del Retiro.
La terminal valenciana en la que ha desinvertido JP Morgan tiene un patio un 22% más grande que el parque del Retiro para atender a 3,5 millones de contenedores
La instalación cuenta con una terminal ferroviaria propia con conexión con los puertos secos de Madrid, Zaragoza y Bilbao. La capacidad de esta terminal alcanza los 3,5 millones de contenedores. El área de influencia directa se estima en un radio de 350 kilómetros por lo que abarca el 55% del PIB español.
La terminal valenciana participada por Cosco en un 51% y por CMA en un 49% tiene un potente plan inversor para los próximos años en los que están previstos destinar 120 millones de euros. La inversión se centra, fundamentalmente, en la maquinaria de patio. La previsión de tráfico de esta terminal para 2023 es de 2,3 millones de TEU mientras que la capacidad se sitúa en 3,5 millones. Con las inversiones previstas, la terminal podría llegar a mover hasta 4,6 millones de contenedores al año.
La llegada de CMA a una terminal del Puerto de Valencia, cuya concesión expira en marzo de 2041, tiene la trascendencia de que se junta con MSC, Maersk y Cosco, lo que convierte la recinto valenciano en sede de operaciones de las cuatro principales navieras del mundo.
Terminal en Bilbao
La operación de venta de JP Morgan a la naviera francesa CMA CGM también contempla la adquisición de un 38% de una terminal en el puerto de Bilbao. Esta instalación tienen capacidad 950.000 contenedores con un patio de 43 hectáreas y 1.150 metros de línea de atraque.
La posición de los franceses en Valencia y Bilbao se complementan con las que tienen en Algeciras y Sevilla y las soluciones terrestres de envío y logística de extremo a extremo con el objetivo de ofrecer servicios con todo el mundo a sus clientes de España.
CMA CGM tiene 470 empleados ubicados en nueve oficinas en España (Valencia, Barcelona, Bilbao, Gijón, Las Palmas, Madrid, Sevilla, Tenerife y Vigo) y dos en Portugal (Lisboa y Leixoes) y opera 35 servicios marítimos directos sirviendo a 18 puertos de escala en España.