Caixabank prevé que Valencia crezca un 1,9% frente al 1,3% del conjunto de España
El servicio de estudios de Caixabank prevé que la economía de la Comunidad Valenciana crezca un 1,9% este año frente al 1,3% del conjunto de España. El avance será el mayor en la península ya que Caixabank pronostica un crecimiento del 4% en Baleares del 2% en Canarias. Tras el 1,9% valenciano, para Cataluña pronostica un crecimiento del 1,4%. A la cola del ranking de crecimiento por autonomías se sitúa Castilla y León (+0,6%) y Castilla-La Mancha (+0,8%).
A este avance del PIB se llega ya que «si bien el consumo y la inversión se verán afectados por la mayor inflación y las subidas de tipos de interés, la mejora de los cuellos de botella y la corrección de los precios energéticos beneficiarán a la actividad industrial y las exportaciones». Este aspecto de la mejora de los precios energéticos ya fue apuntado por José Ignacio Goirigolzarri en la presentación de la cuenta de resultados de 2022 cuando se le preguntó por la evolución de la cerámica sobre la que ya apuntó que la caída del precio del gas le iba a beneficiar al sector cerámico durante este ejercicio.
En este sentido, el estudio ahondan en la «elevada orientación exportadora» de la Comunidad Valenciana, con
un peso de las exportaciones de bienes en el PIB regional del 28,8%, 2,6 puntos por encima de la media española. Es la
cuarta comunidad por volumen de exportaciones de bienes, con 32.413 millones de euros en 2021, el 10,2% de las exportaciones españolas.
Las principales partidas exportadoras de la Comunidad Valenciana son los alimentos (22,7%), la automoción (14,1%) y la cerámica (11,5%)
«Los principales productos exportados son alimentos (22,7% del total), sector de automoción (14,1%) y productos cerámicos (11,5%). La comunidad concentra el 52% de las exportaciones españolas de materiales de construcción, el 43% de calzado, el 40% de alfarería, el 28% de manufacturas de cuero y el 25% de frutas, legumbres y muebles», añade el informe.
Uno de los motivos esgrimidos por el banco para pronosticar el crecimiento valenciano es la buena marcha del sector turístico. «Aunque la región presenta un elevado peso de las actividades turísticas, tiene menor dependencia del turismo internacional que el conjunto de España. En 2022 las pernoctaciones –de españoles y extranjeros– en establecimientos turísticos cerraron el año con una subida del 53,6% interanual (+73,3% en media nacional), mientras que la brecha con los niveles prepandemia se recorta hasta el –3,4% (–4,7% en España)», explican.
Otro de los argumentos para el crecimiento es que «la desaceleración del consumo está siendo más moderada
que en el conjunto español. Así, las ventas minoristas (en volumen) se estancaron en 2022, un dato que mejora, en
todo caso, el de España (–1,0%); de este modo, se sitúan un 2,3% por debajo de los niveles de 2019 (–4,2% en el caso de
la media española)».
Respecto al empleo, el servicios de estudios de Caixabank sostiene que la Comunidad Valenciana tiene «una mejor evolución que el conjunto de España, con un aumento de afiliados del 4,7% en 2022 (vs. 3,9%)». En enero de este año el crecimiento se ha amortiguado (2,5% vs. 2,3%), pero la cifra de afiliados supera en un 9% el nivel de enero de 2019 (+6,7% en España).
«Construcción y, sobre todo, hostelería son las actividades más dinámicas en términos de empleo». Por su parte, la tasa de paro se sitúa en el 13,5% en el cuarto trimestre 2022, cifra que supera en 6 décimas la media española, pero que mejora los registros del cierre de 2019 (14,1%).
El turismo impulsa el crecimiento
En relación al año pasado, según las estimaciones del servicio de estudios de CaixaBank, «el PIB valenciano creció un 5,1% en 2022 (5,5% de media), gracias, sobre todo, a la recuperación del turismo doméstico y el tirón del consumo, apoyado en el buen tono del mercado laboral. Asimismo, la economía se vio menos afectada de lo esperado por los problemas de suministros en los mercados internacionales».
La Comunitat Valenciana es la cuarta economía española, con un peso sobre el PIB nacional del 9,3%. El PIB per cápita asciende a 22.289 euros y se sitúa un 12,6% por debajo de la media española. El retroceso de posiciones en los últimos años se debe, en parte, al mayor aumento demográfico. La población es de poco más de cinco millones de habitantes, el 10,7% del total, y es también la cuarta comunidad en términos demográficos.
En especialización productiva, la región destaca por un mayor peso relativo de la industria manufacturera (15,8% vs. 12,8% de la media española), la construcción (6,5% vs. 5,6%) y el comercio, transporte, hostelería y ocio (27,5% vs. 26,2%). En cambio, el peso es menor en Administración pública (18,3% vs. 19,2%) y servicios ligados a la industria (26,5% vs. 29,2%).