Alcoa revela que los resultados de Alúmina mejoran, pero mantiene el recorte en San Cibrao
Los altos precios del gas dan un respiro a la refinería de Alúmina de Alcoa en San Cibrao que, no obstante, continúa con su producción recortada a la mitad precisamente para minorar sus gastos. Lo ha indicado el número dos mundial de la multinacional americana, William Oplinguer, en la conferencia ante analistas que tuvo lugar esta semana, tras la presentación de unos resultados anuales en los que la compañía regresó a los números rojos, tras perder más de 100 millones de dólares en 2022.
Con la planta de aluminio primario en hibernación hasta 2024 debido a los altos precios de la electricidad, el espectacular alza del gas vivido el pasado año, hizo que Alcoa tomase la determinación de recortar por encima de un 50% la producción en la factoría de Alúmina, en los últimos años, gran motor de beneficios del complejo de San Cibrao.
Si bien la factoría mantiene el recorte (de producir unas 4.500 toneladas diarias ha pasado a 2.200 toneladas) el volumen de pérdidas acumulado comienza a descender, según Oplinguer. “Estamos viendo precios de gas mas bajos en Europa para la refinería de San Cibrao”, indicó. “Los resultados de la misma mejoraron en el cuarto trimestre respecto al tercero y anticipamos que volverán a mejorar en el primer trimestre de este año debido a un par de acciones”, dijo el ejecutivo, que destaca tanto la bajada de los precios del gas como “algunas de las acciones comerciales que hemos tomado para tratar de impulsar algunos aumentos de precio en nuestro negocio y tratando de optimizar el costo de operar en la refinería”, explicó, sin dar, de momento, ninguna fecha sobre cuándo levantará el grupo el recorte en la factoría lucense.
Hay que tener en cuenta que en la anterior conferencia ante analistas, ofrecida el pasado noviembre, Oplinguer indicó que la planta de Alúmina de A Mariña acumuló unas pérdidas que alcanzaron los 70 millones de dólares en el tercer trimestre del año.
Resultados
Alcoa, el mayor productor estadounidense de aluminio, registró pérdidas de 102 millones de dólares (94 millones de euros) al cierre de 2022, en contraste con el beneficio de 429 millones de dólares (397 millones de euros) del año precedente como consecuencia del impacto de unos mayores costes, así como de elementos fiscales y relacionados con la reestructuración.
El resultado ajustado de la multinacional en el ejercicio arroja, no obstante, un beneficio de 890 millones de dólares (823 millones de euros), un 31,4% inferior al contabilizado en 2021.
En este sentido, la empresa apuntó que los precios más altos del aluminio y la alúmina en la primera mitad de 2022 permitieron generar ganancias atribuibles de 1.000 millones de dólares (925 millones de euros) a pesar de los altos costes de las materias primas y la energía, pero «a medida que los precios de venta cayeron en la segunda mitad de 2022, estos altos costes persistieron».
Al margen de la situación de la planta de Alúmina, está previsto que dentro de un año, el grupo inicie el rearranque de las cubas de electrólisis de la factoría de aluminio primario. El grupo está pendiente de la tramitación de los parques eólicos de Greenalia y Endesa ligados a los contratos de PPA que ha establecido con las mismas para poder abastecer el complejo de energía renovable.
