Estas son la preguntas trampa que te harán si solicitas la incapacidad permanente
El proceso para solicitar una pensión por incapacidad permanente incluye la apertura de un expediente y una evaluación médica
La pensión por incapacidad permanente es una prestación económica que la Seguridad Social reconoce a un trabajador si, tras un tratamiento prescrito por enfermedad o accidente, presenta reducciones anatómicas o funcionales graves, que le impiden desarrollar de forma óptima su trabajo.
La cuantía de la prestación varía según el grado de incapacidad (incapacidad parcial, total, absoluta y gran invalidez). De esta forma, las personas que se beneficien de la pensión pueden cobrar un mínimo de 905 euros y un máximo de 3.059 euros al mes en 2023.
El proceso para solicitar una pensión por incapacidad permanente incluye la apertura de un expediente y una evaluación médica por parte de un tribunal de especialistas. El tribunal, llamado Equipo de Valoración de Incapacidades (EVI), analiza al paciente y determina si corresponde otorgarle la pensión por incapacidad permanente, en qué grado y de cuánto será la cuantía.
Esto último es importante porque no solo determina la forma en la que se recibe la pensión si no si es posible compatibilizarla con la realización de otro trabajo o si se pueden recibir una ayuda económica para pagar a otras personas en caso de necesitar cuidados externos.
La evaluación por parte de EVI puede generar incertidumbre, ya que los interesados en percibir la inapacidad permanente suelen desconocer cómo funciona el proceso y cómo deben actual. Por esta razón, es importante tener un conocimiento previo sobre el proceso y recibir asesoramiento especializado para aumentar las posibilidades de éxito.
Preguntas «trampa» del Tribunal Médico
Durante la cita, el tribunal puede hacer preguntas específicas sobre las actividades que la persona realiza en su vida cotidiana y sobre cómo afecta la enfermedad o lesión en el ámbito laboral. Algunas de estas preguntas pueden ser consideradas «trampa» por algunos solicitantes de la pensión de incapacidad permanente, ya que pueden resultar confusas o generar dudas sobre cómo responder.
Estas son algunos ejemplo de preguntas «trampa» que puede hacer el tribunal médico y que pueden ser clave para recibir la pensión por incapacidad permanente:
- ¿Has venido solo a esta valoración?
- ¿Notas que has mejorado últimamente?
- ¿Qué puesto ocupas y cuáles son las tareas fundamentales de tu profesión?
- Explica las dificultades que tienes en el desempeño de tu trabajo habitual
- ¿Estás de acuerdo con lo que la mutua o tu especialista afirma sobre tus dolencias?
- ¿Qué actividades llevas a cabo en tu día a día?
- ¿Cómo te afectan tus síntomas o secuelas?
- ¿Por qué etapas ha pasado tu patología o lesión?
- ¿Cómo te sientes a día de hoy?
- ¿Por qué crees que necesitas una incapacidad permanente?
Aunque la entrevista pueda generar cierto temor, es recomendable acudir a la cita con tranquilidad y exponer ante el tribunal médico toda la verdad, sin exageraciones ni limitaciones.
¿En qué se basa el EVI?
El EVI cuenta con cuatro criterios para determinar si estás en disposición de recibir la pensión por incapacidad permanente y en qué grado.
Uno es los efectos que la lesión o enfermedad puede tener en la vida personal y en el trabajo del afectado; donde precisa si necesita cuidados externos o si puede realizar funciones diferentes. Otro es el análisis del cuadro clínico del trabajador, donde se precisan si hay otras dolencias al margen de las causas por el accidente o la enfermedad, o si es que los efectos de estas pueden incrementarse al combinarse con otras.
También tiene en cuenta si es posible que el trabajador pueda mejorar de su dolencia. En caso de que sea así, el grado de incapacidad será menor.Otros puntos que toma como referente son los historiales médicos, los antecedentes de casos similares, o el análisis del antiguo reglamento de accidentes de trabajo.
¿Qué ocurre si te deniegan la pensión?
Si tras pasar el tribunal médico, la Seguridad Social te deniega la solicitud de la pensión por incapacidad permanente, debes saber que existen mecanismos legales para reclamar. El primer paso sería presentar una reclamación previa a la vía administrativa.
En el caso de que te sigan denegando la pensión, puedes dar un paso más e interponer una demanda judicial y seguir recurriendo el Tribunal Superior de Justicia o incluso ante el Tribunal Supremo.