Mazón rehuye urgencias: una semana para empezar a negociar y primero con el PSOE
Carlos Mazón, presidente del PPCV y ganador de las elecciones en la Comunidad Valenciana, rehuye las urgencias y, mientras reconoce la necesidad de pactos y negociaciones a nivel municipal, postpone decisiones respecto a la configuración del nuevo gobierno valenciano. Para empezar, no será hasta la semana que viene cuando empiece a dar pasos de cara a ese objetivo.
Los organigramas y los nombres del equipo de gobierno del PP están todavía lejos de ponerse encima de la mesa. «No estoy dispuesto a dedicarme a las quinielas ni a los juegos de sillas», aseveró antes de celebrar una junta directiva regional ante un centenar de cargos populares.
Ayer anunció que el vicesecretario de organización Juan Francisco Pérez Llorca, junto a los presidentes provinciales, pilotarán la ronda de negociaciones y Miguel Barrachina será el interlocutor con los grupos parlamentarios. Primero habrá una reunión con el PSOE, después con Compromís y, finalmente, con Vox.
El esquema, aunque fundamentado en que hasta el lunes 5 de junio no hay resultados definitivos de las elecciones y que el orden de reuniones con el resto de partidos es de mayor a menor representación, permite alejar la negociación con Vox.
Mazón marcó su hoja de ruta en la que ni está en poner nombres al Gobierno valenciano ni en adelantar estrategias de negociación. Su prioridad ahora se limita a asegurar que habrá un gobierno «estable, desde el diálogo y para todos los valencianos».
El segundo objetivo es influir en el gobierno de España en aspectos que el ejecutivo de Sánchez ha desatendido como la cerámica en Castellón, el Puerto en Valencia o el agua en Alicante. También nombró el «maltrato en los presupuestos», «el ninguneo en la financiación», la ley de Costas, los cítricos y la uva. Como ya remarcó en la campaña autonómica, Mazón incidió en que «cuanto antes podamos decirle a Sánchez lo que pensamos de su acción de gobierno con la Comunidad Valenciana, mucho mejor».
Ventaja de alcaldesa: Maria José Catalá planta a Vox
En la estrategia del Partido Popular sobre los pactos, la futura alcaldesa de Valencia, Maria José Catalá, tiene ventajas sobre Carlos Mazón. Las elecciones municipales no se pueden repetir en caso de no ganar la votación en el pleno por lo que en caso no existir una mayoría, la lista más votada pasa automáticamente a obtener la vara de mando. Dicho en clave del ‘cap y casal’, los 13 concejales del PP otorgan ya la alcaldía a Maria José Catalá tengan el voto a favor, en contra o abstención de los cuatro concejales de Vox.
Por eso, la que ya fuera alcaldesa de Torrent y ahora se encamina hacia el Ayuntamiento de Valencia sabe que para el 17 de junio se habrá acabado el debate y no será hasta el 28 de julio cuando se celebrará el primer pleno realmente operativo en el consistorio valenciano. Para entonces, ya habrán pasado cinco días de las elecciones generales. El primer examen de Catalá se producirá en noviembre, cuando debería tener preparado su primer presupuesto municipal de cara a 2024.
El calendario en Les Corts es distinto. Primero se tiene que constituir el parlamento valenciano, cuestión que ocurrirá el 26 de junio. Ese día se conocerá quién es el presidente de la cámara, cargo que actualmente ocupa Enric Morera (Compromís). El hecho de que recayera sobre un diputado de Vox anticiparía un posible pacto posterior.
Si los plazos se cumplieran con normalidad y sin atender a la campaña de las elecciones generales, el pleno de investidura se podría celebrar el 17 de julio, es decir, el lunes de la semana que se votaría el nuevo presidente del gobierno.