Palma renuncia a ser el agente de Stellantis en Valencia y dedica la inversión a comprar un colegio
Manuel Palma, presidente del grupo Palma, ha renunciado a ser el agente comercial de las marcas de Stellantis Fiat y Jeep en Valencia, seguirá con referente de Opel en Valencia y ha dedicado la inversión que tenía prevista para la automoción en la compra de un colegio. De este modo, el grupo empresarial pasará a tener 180 empleados en el sector de la educación, 130 en servicios sociales y 100 en la automoción.
Grupo Palma, histórico grupo de concesionarios valenciano de la marca Opel y Ford, renuncia a vender las marcas Fiat, Jeep, Peugeot y Citröen y convertirse en uno de los agentes de referencia de Stellantis en la provincia de Valencia. «Teníamos el mapa de las instalaciones aprobado ya por ellos», explica Palma a ECONOMÍA DIGITAL, que continuará en el sector de la automoción en sus talleres, con el modelo de agencia para los vehículos comerciales de Opel, como concesionario de Opel hasta 2026 y con su propia marca de vehículos de ocasión.
Respecto al negocio de la automoción, Palma sostiene que tiene 30.000 metros cuadrados y «más de 20 millones de euros invertidos y no sé que negocio voy a desarollar». El problema que tiene, según explica, es desconoce qué ingresos tendrá cuando sea agente. «En vehículos industriales vamos a ser agente a partir de julio y no sabemos qué comisión vamos a tener«, explica Palma, que desde sus instalaciones sale una buena parte de las furgonetas de reparto que utiliza Mercadona.
«Invertir en el automovil ahora es como invertir en criptomonedas. Hasta que no esté claro qué se va a ganar en el sector, todo es una incertidumbre», explica el empresario, que asegura: «Prefiero esperar».
La situación en educación difiere mucho a la de la automoción. «La rentabilidad en la educación es muy baja y muy segura», asegura Palma, que ante esta coyuntura ha decidido paralizar su inversión en la automoción y focalizarse en la educación con la compra del colegio Yocris.
Manuel Palma asegura que invertir en automoción tiene el riesgo de las criptomonedas mientras la educación tiene bajo riesgo y baja rentabilidad
El colegio adquirido imparte educación infantil, primaria y secundaria, tiene escolarizados cerca de 400 alumnos y cuenta con una amplia trayectoria en el sector educativo que se remonta más de cincuenta años, con una sólida reputación y una larga lista de éxitos académicos. Cuenta con cuarenta y cinco empleados y unas instalaciones en propiedad completamente equipadas que están ubicadas en Almassera. El colegio se ubica en una parcela de 4.500 metros y está compuesto por distintas edificaciones que ocupan una superficie construida de 3.300 metros que permiten ofrecer una experiencia educativa de alta calidad a sus alumnos, según explican desde el Grupo Palma.
La adquisición del colegio se enmarca en el plan de expansión de Grupo Palma, que tiene como objetivo aumentar su presencia en el mercado educativo y ofrecer una educación de calidad a más estudiantes, está comprometido con la excelencia académica, la innovación educativa y la formación integral de sus alumnos, valores que se ven reflejados en la adquisición de este prestigioso colegio.
El holding Grupo Palma cuenta, además del educativo, con empresas en los sectores del automóvil, servicios sociales e inmobiliario. Tiene una amplia experiencia de más de veinticinco años en el sector educativo donde cuenta en la actualidad con otros dos colegios, Centro educativo Palma en la Cañada, colegio que en la actualidad es el único que lleva 13 años seguidos quedando entre los diez primeros colegios en nota media de selectividad en toda la Comunidad Valenciana y Palma Kids, colegio bilingüe con metodología Montessori ubicado también en la Cañada.