El plan de refinanciación de Nomdedeu, presidente de Ascer: promete a la banca atrasar pagos a proveedores
Azteca Cerámica, la empresa familiar de Vicente Nomdedeu, presidente de Ascer (patronal de la cerámica) y vicepresidente de la CEV (patronal de la Comunidad Valenciana), está negociando con la banca una refinanciación de 3,3 millones de euros de préstamos hipotecarios para los que se plantea un año de carencia más un calendario creciente de devolución de deuda que se prolongaría hasta 2028.
Según fuentes próximas a la operación consultadas por ECONOMÍA DIGITAL, la compañía familiar de Nomdedeu tenía en 2020 un periodo medio de pago a los proveedores de 111 días mientras que en 2022 se situó en 92 días. La última cruzada de Ascer ha sido que se realice una excepción en la ley de morosidad que impide a las empresas que lo incumplen cobrar subvenciones.
El mantra repetido por la patronal azulejera es que las empresas cerámicas quieren subvención, no préstamos. La que a principios de esta semana aún era ministra de Industria, Reyes Maroto (durante su último contacto con el sector en el marco de Cevisama, certamen del sector cerámico que visitó el 28 de febrero), ya dijo que no iba a pagar ayudas a las azulejeras a costa de que los proveedores cobraran a más de 60 días.
La propuesta de refinanciación de la empresa de Nomdedeu, representante del sector azulejero, amplía todavía más el incumplimiento que realiza de la ley de morosidad ya que pasa de los 92 días de promedio en 2022 a elevar y mantener en 95 días el periodo medio de pago hasta 2029.
Esta propuesta del presidente del sector azulejero a la banca se produce tras constatar que la deuda de Azteca Cerámica asciende a 14,4 millones de euros, donde la única parte refinanciable es la hipotecaria.
Sumando deuda hipotecaria (3,3 millones), ICO (2,8) y resto de deudas a largo plazo (0,8), el pool bancario está formado por Caixabank (2,53 millones), Santander (1,72), Bankinter (1,23), Deutsche Bank (0,61), BBVA (0,47) con Cajamar y Sabadell, cada una, por debajo de los 200.000 euros y Abanca, ligeramente por encima de los 100.000.
El Loan to Value de los inmuebles de Azteca sujetos a garantía hipotecaria a finales del año pasado eran del 32,1% dando por buena la tasación que se realizó para la refinanciación de la deuda que acometió la compañía en 2018, antes de que aparecieran las subidas de costes que empezaron tras el Covid y se aceleraron con la guerra de Ucrania. Los solares con las naves de la fábrica y el almacén en Alcora, que ocupan 112.267 metros, están valorados en 22,2 millones de euros.
La azulejera del presidente del sector tuvo unas ventas de 34 millones, pero con sólo 0,5 millones de ebitda durante el 2022 frente a unos ingresos de 31 millones en 2021 y 26,6 millones en 2020 con ebitdas de 2,7 millones y 3,1 millones, respectivamente.
A nivel de producción, Azteca terminó el 2020 con 2,7 millones de metros cuadrados, ascendió a 3,1 millones en 2021 para volver a los 2,7 millones en el ejercicio pasado. Sin embargo, el coste de los suministros (fundamentalmente gas y electricidad) han pasado de significar 0,7 euros por metro cuadrado producido en 2020 a doblarse en 2021 hasta los 1,3 euros y volver a casi triplicarse en 2022, cuando se llegó a 3,3 euros por metro cuadrado.
Este coste último se calcula tras un año que se inició con precios de 80 euros/MWh y que llegó a alcanzar los 233 euros/MWh en agosto. Lo llamativo de estos datos es que cuando la compañía ofrece su plan de pagos reconoce un precio medio del MW/h del gas de 20 euros en 2020, 35 euros en 2021, 110 en 2022 pero de 50 euros en 2023 y 40 euros en 2024 con un sostenida y regular bajada del precio hasta 2029 cuando estaría, según la hipótesis de Azteca, en 33 euros.
En la hipótesis que plantea la empresa familiar del presidente de Ascer a la banca se reduce el gasto en presupuesto de ferias. Tal y como contó ECONOMÍA DIGITAL, Vicente Nomdedéu prefirió que su empresa se quedara en su showroom en vez de acompañar al resto de socios de Ascer que exponen en Cevisama, principal feria del sector en España, en la edición de este año, para el que aplica una reducción del 8%, que mantiene para el resto de su plan de negocio.
En 2020, el beneficio fue de 774.000 euros mientras que en 2021 se redujo a 361.000. Las pérdidas en 2022 se alargan hasta los 1.819.000 euros. La compañía asegura que con estos datos no puede asumir 3,3 millones de deuda este año y otros 3,2 millones en el próximo ejercicio.
En la cuenta de resultados sorprende el gran incremento en la variación de las existencias, cuyo incremento se atribuye al aumento del coste de la producción. De valores de 312.000 y 204.000 euros en los años precedentes se dispara a 2,4 millones en 2022, lo que en la cuenta de resultados se anota como ingreso reduciendo pérdidas. Dicho de otro modo, sin esta situación, las pérdidas en 2022 serían más del doble de las contabilizadas.
Azteca vende entre 5,1 y 24,9 euros el metro cuadrado en España
Para explicar a la banca su posición en el mercado, Azteca desvela sus principales clientes, que en su mayoría son españoles aunque con gamas de precio muy dispares que oscilan entre los 10,1 euros por metro cuadrado a su principal cliente a los 17,6 euros.
Pero hay excepciones extremas como un cliente (que se lleva el 7% de sus baldosas y es el tercero en volumen de Azteca) cuyo precio medio es de 5,1 euros. El cuarto en volumen, por ejemplo, compra a 14,2 euros (casi tres veces más caro que su predecesor en el ranking) mientras otro cliente (que se lleva el 2% de los metros cuadrados) paga de media 24,9 euros por metro cuadrado.
Azteca dice que ha subido los precios en 2022 pero no lo suficiente. En enero de este año ha elevado las ventas en facturación un 14% (de 2,24 millones a 2,55) pero en metros cuadrados ha reducido su alcance un 4% (al pasar de 197 millones de metros cuadrados a 190).