Los proveedores de la automoción disparan un 17,4% los ingresos por la inflación sin mejorar márgenes
La industria auxiliar de la automoción disparó su facturación un 17,4% hasta alcanzar los 37.668 millones de euros. Las ventas al exterior crecieron un 15,3%, hasta los 22.669 millones de euros. Los proveedores de la automoción españoles exportan el 60% de sus productos a más de 170 países de los cinco continentes, tal y como ha explicado Sernauto en rueda de prensa.
De la facturación en el mercado nacional (14.999 millones de euros), 9.110 millones de euros corresponden al suministro de equipos y componentes a los fabricantes de vehículos (+24,9%) y 5.889 millones de euros proceden del mercado de recambios (+14,9%).
Desde Sernauto se ha asegurado que el aumento de la facturacón no implica «un aumento de actividad sino de costes», entre los que citaron los laborales y energéticos y la inflación en general. Aseguran que «no están para tirar cohetes». De hecho, apuntaron que «la producción ha bajado y los márgenes siguen siendo muy ajustados«.
Francisco J. Riberas, presidente de Sernauto, ha dicho: «el incremento en la facturación no se ha debido a una mayor actividad sino al impacto de la inflación. La facturación de 2022 no refleja la situación real de nuestra industria, muy afectada por el aumento de costes y la inflación. No todas las empresas tienen la misma capacidad para repercutir el incremento de costes a sus clientes y ha sido un año especialmente complicado para muchas pymes”.
El sector incrementó casi un 12% su inversión en capacidades productivas, invirtiendo un total de 1.520 millones de euros para seguir siendo una industria competitiva, innovadora y adaptada a las necesidades de sus clientes. Además, los proveedores aumentaron un 5,8% su inversión en Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i), alcanzando un total de 1.231,5 millones de euros, lo que supone un 3,3% de la facturación total y el triple que la media industrial.
Riesgo del perder el tren del coche eléctrico
Riberas apuntó a la necesidad de intensificar la colaboración público-privada que permita, entre otras cuestiones, el desarrollo de planes como el Perte2. «Si perdemos el tren del vehículo eléctrico, tendremos un problema«, advirtió Riberas, que añadió: «En las inversiones del coche eléctrico, o se hacen ahora o no se van a hacer».
Mientras llegan estas inversiones, desde Sernauto se apuntó que en 2022, el sector dio empleo a un total de 329.950 personas (directa e indirectamente). El empleo directo aumentó ligeramente hasta las 203.000 personas (+0,8), incrementándose también su grado de cualificación.»El empleo directo se caracteriza por ser estable, de calidad, repartido por toda la geografía y cada vez más avanzado tecnológicamente», destacaron desde Sernauto, que apuntaron que la remuneración en la industria del automóvil está, de media, un 12% encima que la del conjunto de la industria.
“Teniendo en cuenta la bajada paulatina de la producción de vehículos a nivel mundial, las circunstancias vividas los últimos años y la incertidumbre imperante, hemos de decir que el hecho de seguir manteniendo las cifras de empleo demuestra el compromiso del sector con el talento”, resalta José Portilla, director general de Sernauto.
Según las primeras estimaciones de la junta directiva de Sernauto, en 2023 la facturación del sector se incrementará en torno a un 6% respecto a 2022 y se seguirán manteniendo los niveles de empleo, con un ligero aumento del 1%, por la necesidad de seguir incorporando perfiles cada vez más digitales y tecnológicos. Estas previsiones están sujetas a la evolución de la producción de vehículos, el mercado y la situación geopolítica y económica a nivel mundial, matizan.
Ante esta situación, el director general de Sernauto, José Portilla, insiste en la importancia de activar medidas de apoyo a la industria desde las administraciones públicas: “En este contexto de incertidumbre provocada por factores exógenos, es imprescindible contar una estrategia país que apoye a nuestras empresas y genere confianza tanto en los inversores como en los consumidores. Por eso, para cumplir con las previsiones de crecimiento y seguir siendo una industria competitiva, en 2023 será fundamental la llegada de los fondos europeos a las empresas, lo que les permitiría contar con un cierto margen en cuanto a financiación se refiere”.