Linkener realiza 200 instalaciones fotovoltaicas en 2022 y se marca como objetivo crecer un 50% este año
Linkener Renovables realizó, en 2022, un total de 200 instalaciones fotovoltaicas, tanto industriales, como residenciales y aisladas. Asimismo, la compañía prevé incrementar en un 50 por ciento su actividad durante este año.
Tal y como explica Sergio Ferrer, CEO de Linkener, “en el 2021 duplicamos el número de instalaciones con respecto al año 2020 y, en 2022, casi hemos triplicado ese número. El crecimiento está siendo exponencial, a medida que los consumidores han visto que la crisis energética ha venido para quedarse y que el coste de la electricidad va en aumento, el número de solicitudes de instalaciones fotovoltaicas se ha disparado”.
Con los actuales precios de la electricidad, una instalación fotovoltaica industrial para autoconsumo puede amortizarse en un plazo de 1 a 3 años. Además, actualmente, los fondos Next Generation, sumados a los incentivos fiscales como la bonificación sobre el IBI y el IRPF, pueden llegar a suponer en una instalación doméstica hasta el 80% del coste de la instalación de autoconsumo, dependiendo del municipio en el que se encuentre.
Las subvenciones Next Generation son un compendio de ayudas creado por la Unión Europea para la ejecución de instalaciones ligadas al autoconsumo y al almacenamiento, con fuentes de energías renovables, promoviendo así las energías verdes y abogando por una mayor eficiencia y sostenibilidad.
Asimismo, el impuesto sobre bienes inmuebles es otro de los tributos que puede verse afectado si se dispone de una instalación fotovoltaica para autoconsumo. En este caso, es el ayuntamiento de cada municipio, el encargado de determinar la duración y porcentaje de deducción de dicha deducción.
En el caso de la Comunidad Valenciana, aunque hay municipios que todavía no bonifican el IBI, la media de duración de estas deducciones suele estar entre los 3 y 5 años con una bonificación de entre el 15 y el 50 por ciento.
Herramientas web para el diseño de una instalación fotovoltaica
Linkener Renovables ha creado una herramienta digital web que permite a partir de la ubicación, el consumo y el coste actual del cliente, diseñar una instalación fotovoltaica en apenas unos segundos y conocer con detalle el ahorro que se obtendrá, el tiempo de amortización e incluso la cuota de financiación desde 12 hasta 120 meses. La calculadora fotovoltaica, así se llama esa novedosa herramienta, permite diseñar cualquier tipo de instalación, con distintas superficies, orientaciones e inclinaciones, dando como resultado un informe muy detallado.
De esta forma, mediante la introducción de unos sencillos datos como son la dirección donde se realizaría la instalación fotovoltaica, la selección de las superficies a analizar, la orientación del tejado y el consumo energético del cliente, la persona interesada en realizar la instalación puede conocer cuántos paneles solares serían necesarios, qué potencia tendría, la energía que autoconsumiría y la que vertería a red, el precio de su instalación completa, el estudio de amortización y las opciones de financiación.
Como explica el CEO de Linkener, “con los resultados obtenidos a través de la calculadora fotovoltaica, se obtiene un detalle muy real de lo que se va a hacer y lo que va a obtener el cliente tras la instalación. Además, antes de iniciar el proyecto, realizamos una visita técnica con la que verificamos que lo ofertado es factible, dando la tranquilidad al cliente de que no van a haber sorpresas. En Linkener analizamos todas las necesidades del proyecto y nos ocupamos tanto de realizar la instalación como de gestionar y tramitar todas las ayudas y subvenciones de las que se pueda beneficiar”.
Linkener nació en 2014. Su creador, un ingeniero industrial valenciano, está focalizado en reducir la factura energética. La compañía distribuye y comercializa sus soluciones tecnológicas a través de asesores energéticos, comercializadoras eléctricas, consultores o ingenierías cuyos clientes son empresas, industrias, corporaciones y edificios públicos en los que se pueden poner en marcha las soluciones tecnológicas que desarrolla.