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La Confederación Empresarial Valenciana (CEV) ha aprobado hoy sus cuentas de 2022 y el presupuesto de 2023 con las vistas puestas en la conformación del nuevo gobierno encabezado por Carlos Mazón. Los deseos de la patronal valenciana son que la Comunidad Valenciana tenga un gobierno «fuerte y estable» y con «reputación importante para trabajar en Madrid». Los objetivos son mejorar la financiación autonómica, la condonación de la deuda, el trasvase Tajo-Segura y y una mejora de las infraestructuras.

La más relevante es la ampliación del Puerto de Valencia, que está pendiente de la aprobación por parte del Consejo de Ministros de la inversión ya aprobada por el consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV, que controla los puertos de Valencia, Sagunto y Gandia). «Nos gustaría que estuviera incluso antes del 23 de julio», ha dicho Salvador Navarro, presidente de la CEV.

La segunda infraestructura por importancia es la referente al aeropuerto de Alicante, sobre la que se incidió que es el único de sus características de tráfico y relevancia que no tiene conexión ferroviaria.

Además de esta revindicaciones, el decálogo de la CEV recoge aplicar un sistema impositivo competitivo en el que se diga «adiós al impuesto turístico y que se eliminen o revisen aquellos tributos que lastran la competitividad del tejido productivo tanto dentro como fuera del país». También se apostó por el diálogo social, la formación y la innovación.

Mención aparte tuvo el próximo ejecutivo de Carlos Mazón en la Generalitat. «Estuvimos reunidos con el Partido Popular y nos presentaron el plan simplifica, que es lo que necesitamos las empresas para que eliminar la burocracia de la administración. Se dijo en periodo electoral y vamos a pedir que se ponga en marcha en este gobierno que está por conformar», ha comentado Navarro a los medios de comunicación.

Cuentas con beneficio y previsión de crecimiento

Salvador Navarro ha explicado que la patronal continua «ampliando su base asociativa tanto en empresas como en asociaciones». De este modo, la patronal valenciana cuenta con 580 asociacoines integradas y 159 empresas que son socias de la CEV a título personal. La última conocida de esta lista es Volkswagen.

Pese a estos datos, la previsión ingresos por cuotas de asociados y afiliados en 2022 era de 1.347.006 euros y se ha ingresado un -0,74%, es decir, unos 10.000 euros menos. Esto se ha compensado con un crecimiento del 56,3% de los ingresos propios, que han pasado de 343.000 euros previstos a 536.000.

Para este ejercicio, la previsión de ingresos totales sube en el entorno del 1% hasta rozar los tres millones de euros (2.982.151,92 euros), con un crecimiento de las cuotas de asociados y afiliados del 8,71% hasta alcanzar los 1.453.489,75 euros.

La partida de gastos prevé una caída del 6,65% de los gastos de funcionamiento (hasta 1.385.589,80 euros) mientras que el gasto de personal escala un 8,77% (hasta los 1.521.795,03 euros). La patronal valenciana ha tenido una diferencia positiva entre ingresos y gastos de 41.781,45 euros mientras que se espera un resultado neutro en 2023.

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