Baleària se lanza a por el Caribe con la compra de Armas en la recámara
Adolfo Utor, presidente y accionista único de Baleària, se ha marcado tres objetivos: crecer en el Caribe, renovar su flota y que no se le escape la opción de crecer a través de Armas Transmediterránea, especialmente, en el mercado canario. La ambición se sustenta en unos resultados que sobrepasan en más de un 20% los obtenidos antes del Covid con una posición de dominio del mercado balear, tanto entre islas como con la península.
«Estamos pendientes y somos conscientes de que los dueños de Armas no están para quedarse«, ha explicado Utor, que ha optado por obviar la intensidad de las conversaciones con los fondos propietarios de Armas Transmediterránea para una posible venta, sobre la que sí ha dejado claro que «está posicionado» para pujar en el momento en el que sea preciso. Esta operación le permitiría a Baleària crecer en Canarias, un mercado en el que tiene una posición residual.
El foco principal del crecimiento lo sitúa en el Caribe desde la base que la compañía tiene en Bahamas. «A partir de ahí, queremos ir a República Dominicana, Puerto Rico y Cuba«, ha dicho Utor que ha asegurado que la naviera tiene «posibilidades ciertas de avanzar en el Caribe». De hecho, lo ha situado como su principal línea de crecimiento. «En los próximos años tendremos despliegue de ferrys en el Caribe», ha asegurado.
Estos dos mercados son las principales vías de crecimiento mientras el centro del negocio está en Baleares y en Marruecos, cuya reapertura del tráfico después del Covid el año pasado ha permitido el despegue en la cuenta de resultados. Argelia sigue cerrado pero esto no es un problema para la naviera que ve este mercado como complementario al de Marruecos, donde tiene una mejor posición.
La facturación de Baleària en 2022 alcanzó los 563 millones de euros, lo que supone un 42% más que el año anterior mientras que el ebitda avanzó un 36%, hasta los 140 millones y el beneficio neto subió un 34%, hasta los 67 millones. La diferencia entre ebitda y beneficio neto, ha explicado Utor, se debe a las altas amortizaciones que tiene el sector naviero.
En ese sentido, ha asegurado que su prioridad (la de segundo nivel de importancia, tras Caribe pero ante antes de Armas) es la mejorar la eficacia de sus buques. A finales de mayo esperan poner en marcha el ferry eléctrico ‘Cap de Barbaria’ entre Ibiza y Formentera mientras que para septiembre se espera la botadura del ‘Fast ferry Margarita Salas’.
Desde la compañía naviera han incidido en su implicación con un indicador que han denominado «cash flow social», que es lo que calculan que generan y reparten entre los grupos de interés de la compañía, es decir, desde los astilleros a todo el negocio que realizan con sus proveedores, que en un 77,8% son locales. Este «cash flow social» ascendió a 697 millones de euros en 2022, lo que supone un avance del 21% respecto al año anterior.
La entidad realizó más de 400 acciones y colaboraciones, entre las que destacaron la solidaridad con Ucrania: como la gestión del viaje y alojamiento de 25 refugiados familiares de tripulantes ucranianos, la campaña interna de recogida de productos de primera necesidad y el transporte gratuito de más de 150 refugiados y 125 voluntarios.