La CEV alaba el realismo, la rigurosidad y la voluntad de ejecución en los primeros presupuestos de Mazón
La CEV ha valorado hoy los principios sobre los que se basa el proyecto de presupuestos de la GVA para 2024, «entre los que destacan el realismo y la rigurosidad en la dotación de las partidas, así como su voluntad de ejecución. Estos principios, junto a la implementación de mejoras en la gestión dotan de certidumbre a los agentes económicos que, en definitiva, son los contribuyentes por la parte de los ingresos y los destinatarios de los servicios por la parte de gastos», ha especificado la patronal en un comunicado.
También se valora el fortalecimiento de los servicios públicos fundamentales, «por un lado, y el alivio fiscal para las personas menos favorecidas, por otro. Unidos contribuirán a sostener el bienestar social en un contexto de desaceleración económica», por lo que se desprende la buena acogida por parte de los empresarios a esta primera propuesta presupuestaria del President Carlos Mazón.
Sin embargo, la Confederación no ha querido pasar por alto el complejo entorno actual (haciendo referencia a la crónica infrafinanciación, los menores recursos provenientes de los Fondos Europeos y, por el contrario, los mayores recursos que absorberá el servicio de la deuda de la GVA, sobre el que han advertido de la necesidad de «mantener también y, en su caso, reforzar, las partidas destinadas a fomentar la competitividad de las empresas. La desaceleración de las economías global, nacional y regional, junto con problemáticas concretas que están afectando a ciertos sectores y ramas productivas, requerirán de un apoyo decidido a sus empresas».
Asimismo, desde la CEV se insiste en que las «preocupantes circunstancias financieras de la Comunitat Valenciana, puestas hoy nuevamente de manifiesto, obligan a cambiar el modelo de financiación autonómica, causante de más del 70% de nuestra deuda, con carácter de urgencia».
Por último, indican que es necesario «realizar un análisis a fondo de las partidas de gasto e inversión destinadas a cada uno de los sectores, para ver si el gasto previsto será suficiente y, sobre todo, en los apartados que más lo necesitan».