El PSOE asume que «será muy difícil» investir Sánchez esta semana

A pesar de que las negociaciones entre PSOE y Junts de cara a la investidura de Pedro Sánchez continúan avanzando y aún mantienen la esperanza de cerrar un acuerdo en los próximos días, desde las filas socialistas ya están comenzando a reconocer que el pleno de investidura difícilmente tendrá lugar esta misma semana.

Por el momento, las dos formaciones están enfrascadas en el redactado de la Ley de Amnistía para cerciorarse que no tendrá fisuras y superará tanto el trámite parlamentario como el examen a que previsiblemente la someterá el Tribunal Constitucional, puesto que la oposición ya ha dejado bien claro que tiene intención de recurrir la nueva norma.

Si bien se están produciendo avances en las negociaciones, de manera que el pacto podría llegar en cualquier momento, según han enfatizado fuentes de la negociación a la agencia Europa Press, los plazos para celebrar el pleno de investidura esta semana se han ido complicando paulatinamente con el trascurso del tiempo.

Celebrar el pleno de investidura aún es materialmente posible, a pesar de que conllevará ajustar considerablemente el procedimiento. Sin embargo, la posibilidad de que tenga lugar esta semana se ha ido diluyendo por parte de los propios socialistas, que ahora apuntan hacia la próxima semana como un escenario viable para acudir al Congreso de los Diputados para la cita.

Las negociaciones, centradas en lograr una Ley de Amnistía «impoluta»

La intención de la delegación socialista, que se encuentra en Bruselas desde el pasado domingo, encabezada por el Secretario de Organización, Santos Cerdán, es no volver a España hasta cerrar de forma definitiva el acuerdo. Así, la previsión es que las conversaciones continúen en marcha durante las próximas horas.

Con todo, la negociación entre las dos formaciones avanza a paso lento, a causa de la dinámica del proceso, según apuntan las fuentes mencionadas, que también han concretado que el intercambio continuo de papeles entre los equipos jurídicos de los dos partidos, así como su revisión, están favoreciendo que las negociaciones se dilaten en el tiempo.

En estos momentos, las discusiones pasan por conseguir que la ley sea «impoluta» jurídicamente, es decir, a blindar la norma para que no tenga ningún punto débil o resquicio que pueda poner en peligro su aplicación. Asimismo, han descartado que las negociaciones estén centradas el el caso de Tsunami Democràtic.

Cabe recordar que el juez que instruye la causa, Manuel García Castellón, que dirige la investigación contra el expresidente catalán Carles Puigdemont el pasado lunes imputó a la secretaria general de ERC, Marta Rovira. Así, según las fuentes consultadas, las negociaciones no están tratando nombres propios, sino que se están dilatando porque los juristas de ambas partes estudian a fondo cada documento para evitar «flancos débiles».