Monbus retoma los beneficios millonarios en medio de la investigación por cártel
Monbus va camino de dar la vuelta a sus resultados tras dos ejercicios en rojo. Una de cal y otra de arena para el grupo de Raúl López, que endereza sus números cuando afronta una investigación de la Comisión Galega da Competencia por un presunto cártel con Alsa en el concurso de transporte regular de viajeros por carretera de la Xunta, donde fue la principal adjudicataria. Líder de su sector en la comunidad, la compañía acabó el ejercicio de 2022 con pérdidas de 3,3 millones, elevando los números rojos de 2,8 millones de 2021. Sin embargo, en el curso actual parece volver por sus fueros, dando continuidad a la recuperación que ya percibía en el segundo semestre del año pasado.
A esto apuntan los resultados presentados por Abanca para los nueve primeros meses del año y que recogen también la evolución de sus participadas. En el caso de Monbus, la entidad financiera apunta unas ganancias de 2,3 millones, correspondiente con los beneficios «generados en el ejercicio por las entidades asociadas y negocios conjuntos imputables como consecuencia de su valoración por el método de la participación». Es decir, el beneficio correspondiente al 33,9% que Abanca controla de la compañía de Raúl López ascendería a 2,3 millones. En consecuencia, las ganancias de Monbus se aproximarían a los siete millones a cierre de septiembre.
La mejoría que esperaba Monbus
Esa cifra, de confirmarse a cierre de ejercicio, supondría el vuelco que predecía el propio grupo en el informe de gestión del pasado ejercicio. Explicaba el equipo de Raúl López que en 2023 podrían recuperar un volumen de viajeros similar al de 2019, en base a la «evolución muy positiva» de la demanda en la primera parte del ejercicio, favorecida por las bonificaciones aplicadas en los billetes para contrarrestar la subida de precios.
Además, este año Monbus tenía previsto comenzar a operar cinco nuevas concesiones del plan de transporte de Aragón, y también los contratos de Alto Támega y Metropolitano en Oporto (Portugal). «Se estima que en 2023 el grupo vuelva a tener resultados positivos puesto que en los últimos años se ha visto muy afectado por la crisis sanitaria provocada por el Covid y, en el ejercicio pasado, por la subida espectacular de los
precios del combustibles», señalaba la empresa.
Una investigación en curso
La positiva evolución del rey gallego de los autocares coincide en el tiempo con la apertura del expediente sancionador de la Comisión Galega da Competencia por presuntas prácticas colusorias en el concurso de la Xunta para adjudicar las líneas del Plan de Transporte, 127 lotes repartidos en dos licitaciones de 496 millones y 237,4 millones. La autoridad gallega de competencia se vio obligada a incoar el expediente por las resoluciones judiciales, primero del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia y después del Supremo, que concluyeron que había archivado una denuncia previa por cártel de Monbus y Alsa sin investigarla debidamente.
De los lotes repartidos en esos concursos, empresas del grupo Monbus, a veces con participación mayoritaria en las UTEs y a veces no, se llevaron el 40% de las adjudicaciones. La Consellería de Mobilidades, en respuesta a un informe reciente del Consello de Contas, explicó que que el grupo lucense logró contratos por valor de 36,1 millones al año, lo que supone aproximadamente la tercera parte de los 109 millones de volumen de negocio total del Plan de Transporte.
Elcano, en pérdidas
Las cuentas de Abanca no solo reflejan un cambio de tendencia en Monbus, sino también en la naviera Elcano, en la que la entidad financiera detenta el 20% del capital. En este caso es un cambio a peor. La empresa controlada por Grupo Nosa Terra, de la familia del fallecido José Silveira, aporta pérdidas de 2,06 millones al banco de Juan Carlos Escotet a cierre de diciembre. Se invierten así los papeles del año pasado, cuando el grupo de transportes causaba pérdidas y la naviera aportaba beneficios. En 2022 ganó 6,1 millones.
A la espera de los resultados de cierre de ejercicio, tampoco sería especialmente sorprendente una mala evolución de Elcano. Maersk, que develó este viernes los números de los primeros nueve meses del año, encogió sus beneficios un 82%. Aprovechó la presentación de resultados para avanzar que prescindirá de unos 10.000 trabajadores, el 9% de la plantilla, y para alertar de que se ha producido una caída de fletes, que el mercado está debilitado y que no espera una reacción significativa del mismo hasta 2025 o 2026.