Maersk acelera su inversión en Huelva en pleno compás de espera en Langosteira
Maersk deshoja la margarita en Andalucía. La naviera danesa ha solicitado, a través de su sociedad Phoenix X Spain, una concesión administrativa para ocupar un terreno de 464.750 metros cuadrados de superficie sobre los que levantará su planta de metanol verde.
La compañía se decanta, de esta manera, por la capital onubense cuando todos los focos apuntaban a Algeciras como destino de esta inversión gemela a la que prepara en Galicia. Y es que la compañía avanzó a finales del año pasado que su hoja de ruta contemplaba la puesta en marcha de una inversión por valor de 10.000 millones de euros para producir metanol verde en España.
El plan de Maersk pasa por contar con dos centros de producción de hidrógeno verde en España (uno en Punta Langosteira y otro en Huelva). El antiguo CEO de la naviera, Soren Skou, presentó durante una rueda de prensa conjunta con Pedro Sánchez este protocolo de colaboración mediante el cual se canalizarán unas inversiones con las que se espera que se logre alimentar a una flota de una veintena de barcos en el periodo 2023-2024.
La previsión de la empresa es que el metanol verde sustituya por completo a los combustibles fósiles en su flota antes de 2040. En esta hoja de ruta cobra un papel relevante España, que a través de estos dos emplazamientos prevé crear 85.000 puestos de trabajo directos e indirectos.
La apuesta ‘verde’ de Maersk
A la espera de que la compañía active la maquinaria para encauzar su inversión en Punta Langosteira, Maersk sí quema etapas en Huelva. Allí ha efectuado esta solicitud para la concesión de suelo con el objetivo de llevar a cabo a «la construcción y explotación de una planta para la producción y exportación por vía marítima de combustibles sintéticos, e-fuels y/o biocombustibles».
La solicitud ha sido publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), tras lo cual la Autoridad Portuaria de Huelva ha iniciado el trámite de competencia de proyectos. Así se abre un mes de plazo para la presentaciones de iniciativas que opten a asentarse en estos terrenos en los que Maersk prevé levantar esta planta de metanol verde. Se trata de una de las patas del plan de Maersk, pero no la única.
Según desveló la compañía en su momento, alrededor del 40% de los 10.000 millones de euros de inversión se destinarán a la producción de hidrógeno y metanol verdes, pero el 60% restante irá a parar a la producción de energía renovable necesaria para alimentar estas plantas.
En este escenario cobran un papel destacado los parques solares y eólicos. Maersk ya confirmó que promoverá la construcción de parques y comprará otros que ya estén en funcionamiento o tengan las autorizaciones administrativas necesarias. El objetivo es contar con cuatro gigavatios de potencial instalado en 2030 para alimentar a las plantas de producción de metanol de Huelva y Punta Langosteira, en las cuales espera producir dos millones de toneladas durante la década.
Maersk consume cada año unos diez millones de toneladas de combustibles y, según sus cálculos, necesitaría el doble de metanol verde (unos 20 millones de toneladas) para llevar a cabo con éxito este proceso de sustitución.
