La Xunta asegura que la Sareb no dispone de ninguno de los pisos prometidos por el Gobierno en Galicia

La conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez, ha afirmado que la Sareb ha trasladado a la Xunta en una carta que no tiene disponible ninguno de los pisos que se había comprometido a movilizar el Gobierno central en la comunidad gallega.

Así lo ha desvelado este domingo en una entrevista en la Radio Galega en la que ha detallado que la Sareb cuenta en Galicia con «un perímetro de unas 1.200 viviendas» pero, de ellas, «479 se encuentran en comercialización externa» y «806 tienen algún tipo de saneamiento pendiente«.

Viviendas en Mugardos y Silleda

«Ni siquiera nos están ofreciendo las 43 que nos ofrecían anteriormente. Esto es un despropósito y una vergüenza. Si alguien del Gobierno gallego hiciese eso tendría que estar dimitiendo», censuró.

Sobre esas 43 que «notificaron que tendrían a disposición», Vázquez ha relatado que les han trasladado que «solo cinco tienen licencia de primera ocupación». Además, «tres están ocupadas» y «solo una en una ciudad». «El mayor número de viviendas que nos ofrecían era en Mugardos y en Silleda, y fíjense que ahí no hay tensión para alquilar», apuntó.

Ley de Vivienda e “inquiokupación”

Cuestionada sobre si recurrirán la ley de Vivienda, Ángeles Vázquez ha señalado que esperarán a conocer el texto definitivo, pero ha reconocido que la Xunta está «muy preocupada«. Entre otros motivos, porque considera que «se van a retirar viviendas del mercado» y la clase media «va a acabar defenestrada».

Según la conselleira, la norma «no incentiva», sino que «sanciona fiscalmente» y la gente «buscará otros recursos», como el turismo. Además, ha criticado que «tampoco se regula el concepto de vivienda vacía», así como que «se regula la inquiokupación«.

«¿Quién puede estar en esa vivienda? Aquellos que no superen tres veces el Iprem. Estamos hablando de 1.800 euros de salario mensual. El 80% de los gallegos podrían ser okupas si así lo quisiesen. Esto va a ser un caos y hay que frenarla», insistió.