Cooke, un comprador compulsivo para el timón de Nueva Pescanova
Un día antes de que Abanca anunciara que emprendía negociaciones exclusivas con Cooke Seafood, el primer ejecutivo del grupo canadiense anunciaba la adquisición de Slate Gorton, uno de los mayores distribuidores de pescado fresco y congelado de los Estados Unidos. Glenn Cooke se fotografío con una gorra de béisbol al lado de la CEO de su nueva filial. Podría ser una casualidad, pero todo entraba dentro de lo probable. A Glenn Cooke le gusta mostrarse en público con sus gorras y la pesquera norteamericana, una de las mayores del mundo por producción y cifra de negocio, ha comprado siete empresas desde 2019. Si el proceso de negociación con Abanca cuaja, Nueva Pescanova será la octava.
La familia Cooke fundó la compañía en 1985 enfocada a la cría de salmón en plantas de acuicultura. Creció a base de adquisiciones, alcanzando los 2.000 millones de ingresos y los 10.000 trabajadores. La propia empresa reconoce que ahora, casi 40 años después de su nacimiento, está en un «agresivo plan de crecimiento» con una «búsqueda estratégica continua de oportunidades». Compra todavía más que antes. Y, para muestra, un botón.
De compra en compra hasta Nueva Pescanova
La compañía canadiense acaba de comprar Slade Gorton, con sede en Waltham; solo unos meses antes, el pasado noviembre, cerraba una de las operaciones más relevantes de la historia del grupo con la compra de la australiana Tassal, el productor de integración vertical más grande del país. Ese mismo año compró la belga Morubel, distribuidor de camarón; y el proveedor de transporte por carretera Connors Transfer Limited.
En 2020, se quedó el negocio del distribuidor de pescado fresco y congelado Mariner Seafood, con sede en New Bedford, Massachusetts. Un año antes compró la antigua fábrica de alimentos para peces Skretting en Invergordon (Escocia); y Seajoy Seafood Corporation, una de las granjas camaroneras premium integradas verticalmente más grandes de América Latina.
Precisamente, Cooke comparte con Nueva Pescanova la integración vertical, con patas en toda la cadena de valor, desde la pesca a la transformación y comercialización e incluyendo el negocio original de la acuicultura. Tiene instalaciones en una docena de países, incluyendo España, donde controla la murciana Culmarex, con piscifactorías en el Mediterráneo enfocadas a la lubina y la dorada.
Los números de Abanca
Abanca consideró mejor la oferta de Cooke que las de Iberconsa y Red Chambers, los otros candidatos a quedarse con Nueva Pescanova. En un comunicado, el banco de Juan Carlos Escotet dijo que la operación alcanzará una valoración futura de la pesquera de unos 800 millones de euros, sin dar más explicaciones. Tomándolo como precio final y descontado la deuda de la multinacional gallega, que ronda los 500 millones, la oferta de Cooke podría situarse en los 140 millones más la asunción del pasivo.
Otras fuentes empresariales indican que Nueva Pescanova podría desprenderse de alguna filial o línea de actividad en favor de otra compañía, como Iberconsa. De producirse un movimiento de este tipo, afectaría a una parte pequeña del conglomerado, ya que Abanca expresó hace tiempo su compromiso de no trocear la compañía.
«Desde 2015 realizamos un considerable esfuerzo para salvaguardar la viabilidad de la compañía y mantener la matriz y sus filiales integradas, y a la vez, conservar su sede en Galicia. El acuerdo permite integrar Nueva Pescanova en una de las principales compañías familiares de proteína marina del mundo«, sentenció Juan Carlos Escotet.
Abanca destacó que la pesquera mantendrá su sede en Vigo y que continuará apoyando el proyecto empresarial como aliado bancario.
