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Altri encara la inversión de 850 millones en Palas de Rei con su menor beneficio desde 2011

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La caída del precio de la celulosa lleva la cuenta de resultados de Altri a mínimos de toda la década. La pastera lusa, que en estos momentos deshoja la margarita sobre su inversión para levantar una planta de fibras textiles en Palas de Rei, cerró los nueve primeros meses del año con un recorte tanto de ingresos como de beneficios.

En concreto, su cifra de negocio retrocedió un 25,4%, hasta situarse en los 601 millones de euros entre enero y septiembre. Esta caída en las ventas se ha trasladado con el triple de intensidad a un beneficio neto que se ha desplomado desde los 117,4 millones de euros logrados en los nueve primeros meses de 2022 hasta los 27,6 millones en lo que va de 2023.

En este sentido, las casas de análisis que siguen a la compañía que lidera José Soares de Pina vaticinan que esta dará carpetazo al año 2023 con un beneficio neto por valor de 27,5 millones de euros. Este movimiento a la baja tendría lugar tras el pinchazo experimentado n sus ventas, que bajarían de 1.066 a 780 millones de euros a la espera de que se haga notar el cambio de mercado que predice el consejero delegado de la compañía. «Los sucesivos aumentos de precios en el mercado chino están teniendo un impacto positivos en los precios en Europa», lo que hace que la firma lusa mantenga «una perspectiva positiva para los últimos meses de este año y para 2024».

Esta previsión de mejora de resultados no se haría efectiva hasta 2024, de modo que la firma cerrará 2023 con unas ganancias que contrastarían, de cumplirse, no solo con los 153 millones millones de euros que se embolsó a lo largo de 2022, sino también con los 128 millones de 2021, los 101 millones de 2019 o los 194 millones de 2018. De hecho, habría que remontarse hasta el año 2011 para encontrar un beneficio menor al esperado para este 2023. Fue entonces cuando en medio de la crisis del euro y la recesión desatada por la crisis financiera, Altri despidió el ejercicio con unas ganancias por valor de 22,5 millones de euros.

La decisión final, pospuesta a 2024

Altri se asoma a su peor año en materia de resultados en vísperas de tomar su decisión final sobre la planta de fibras textiles de Palas de Rei. Tras apuntar en un primer momento al primer semestre de este año como fecha límite para dar este paso y posponerlo posteriormente a finales de 2023, la compañía lusa ha avanzado en su presentación de resultados que será a comienzos de 2024 cuando detalle si finalmente lleva a cabo su inversión estrella en Galicia.

«La indicación que dimos antes [para tomar la decisión] era hasta final de año, pero es un proyecto complejo. Necesitamos más tiempo. Continuamos las conversaciones con los gobiernos central y autonómico para la financiación del proyecto, las cuales han tenido progresos significativos», ha destacado Soares de Pina en su presentación de resultados ante los analistas.

Bajo el nombre de Proyecto Gama, la pastera lusa prevé una inversión por valor de 850 millones de euros para levantar un complejo en torno al cual gravitarán 2.500 empleos entre directos e indirectos. Altri proyecta la puesta en marcha de una planta con capacidad para producir 200.000 toneladas anuales de pasta soluble y otras 60.000 toneladas de lyocell.

A vueltas con la financiación

La compañía portuguesa ya avanzó en su momento que su plan pasa por obtener unas ayudas públicas que permitan cubrir alrededor de una cuarta parte de esta inversión que se perfila como clave para producir una materia prima hacia la que ya mira la industria textil para acelerar su apuesta por la sostenibilidad. Sin embargo, el portazo del Gobierno a crear un Perte específico para este proyecto y las incógnitas en torno al acceso a financiación pública ha frenado su desarrollo.

Leer más: El dueño de Greenalia inyecta más de 3 millones en la fábrica de Altri tras hacerse con el 25% del proyecto

El ministro de Industria en funciones, Héctor Gómez, aseguró a comienzos de octubre que la compañía podría presentar su proyecto hacia una línea del Perte de Descarbonización dotada con 250 millones, 150 millones en ayudas y 100 millones en créditos blandos. Sin embargo, el secretario xeral de Industria, Nicolás Vázquez, advirtió semanas después de que el tiempo se agota y que que «se está llegando al final del camino», por lo que está en riesgo la «posibilidad histórica» de contar con esa factoría, aludiendo a que la pastera todavía «sigue esperando por convocatorias o fondos».

Mientras sigue sin despejarse el escenario de ayudas públicas, José Soares de Pina espera que la formación de gobierno allane el camino. «Es positivo que se clarifique el paisaje político en España y seguimos siendo positivos sobre el proceso. Con el nivel de interacciones que hemos tenido, creemos que estas concluirán muy en breve», vaticinaba Soares de Pina.

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