Menéndez y la parsimonia del BCE bloquean las exigencias de la plantilla de Unicaja Banco  

Unicaja Banco sigue esperando a que el BCE dé la autorización a la entrada de Rubiales y, con ello, se espera desbloquear los problemas laborales que denuncia la plantilla

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La plantilla de Unicaja Banco sigue en punto muerto pese a que la crisis de gobernanza parece estar enterrada. El anuncio del cese de Manuel Menéndez como CEO de la entidad andaluza y el posterior nombramiento de Isidro Rubiales como nuevo ‘número dos’ de la firma dibujaban un panorama más pintón para los trabajadores de Unicaja Banco del existente. Por ahora, las mejoras laborales y las negociaciones entre el banco y los empleados siguen encalladas. 

El motivo: por un lado, Menéndez y, por otro, el Banco Central Europeo. Hay que recordar que el cese del CEO procedente de Liberbank es en diferido. Es decir, hoy por hoy, el directivo asturiano sigue siendo consejero delegado de Unicaja Banco hasta que el Isidro Rubiales, su sustituto, reciba el visto bueno del Banco Central Europeo. En resumidas cuentas, la entidad andaluza tiene en su cúpula a un CEO cesado y a otro que está nombrado, pero no ejerce sus funciones como ‘número dos‘ del banco cotizado del Ibex 35. 

La plantilla de Unicaja Banco, en tierra de nadie  

Y en toda esta maraña, es importante destacar que Manuel Menéndez sigue controlando el área de organización y negocio de Unicaja Banco, aunque, como aseguran fuentes internas de la entidad, no está llevando a cabo ningún movimiento. Dicha área es la que atañe sobre varias de las peticiones que la plantilla lleva haciendo al banco desde hace tiempo. Por ejemplo, la reorganización de empleados en las sucursales o la vuelta del teletrabajo para más trabajadores, entre otras.  

Sea como fuere, ninguna de las cuestiones que la plantilla exige a Unicaja que revise serán abordadas mientras Menéndez siga en su posición. Según explican fuentes de la firma bancaria a este medio, «los que están, no se sientan a negociar, y con quienes nos tenemos que sentar, no están aún». Ante esto, la plantilla asevera que la situación actual es de bloqueo. 

Por un lado, está Menéndez quien pese a ostentar el cargo de CEO, está cesado y no está moviendo ficha en el departamento que controla. Por otro, está el BCE que, pese a haber sido uno de los actores más insistentes en los problemas de idoneidad que tenía la entidad malagueña con la crisis de gobernanza, aún no ha dado luz verde a la incorporación de Rubiales como nuevo CEO. 

Isidro Rubiales, CEO de Unicaja Banco
Isidro Rubiales, CEO de Unicaja Banco. Unicaja Banco

Sin cambios a nivel laboral  

Fuentes internas de Unicaja Banco explican que el supervisor europeo está siendo «lento» a la hora de atajar la que para muchos es una fuente de problemas «acuciantes». El clima laboral «tóxico», así como el malestar entre los trabajadores, no es algo nuevo en Unicaja Banco. La plantilla esperaba que con la marcha de Menéndez y, por ende, con la llegada de Rubiales, las trabas laborales fuesen abordadas. Pese a esto, los tiempos no han acompañado a los intereses de unos trabajadores que siguen en tierra de nadie.  

«Seguimos igual», es lo que denuncian los empleados de la firma bancaria, mientras que la institución con sede en Frankfurt sigue abordando el caso. ECONOMÍA DIGITAL ha preguntado al BCE sobre la autorización a la entrada de Isidro Rubiales y no han querido pronunciarse al respecto. 

Isidro Rubiales tiene contacto con el área de negocio de Unicaja 

Mientras tanto, el CEO elegido para sustituir a Menéndez se ha reunido con trabajadores de las áreas de negocio y organización de Unicaja Banco. Como ha podido conocer ECONOMÍA DIGITAL, Rubiales se ha ido informando de las necesidades de los trabajadores de estas áreas, pese a que el Banco Central Europeo todavía no ha dado su ‘ok’ a la autorización.  

La autorización del Banco Central Europeo a la entrada de Rubiales no ha llegado todavía

Como fuere, el que es una de las manos derechas de Manuel Azuaga, presidente de Unicaja Banco, ha ido tomando posiciones en el que, si todo sigue su curso, será su nuevo puesto. Pese a ello, fuentes internas reconocen que, por el momento, Rubiales «no ha hecho nada como CEO» puesto que la autorización del supervisor europeo «todavía no ha llegado».  

Es decir, pese a que Rubiales se ha informado acerca de las necesidades de los trabajadores, aunque por su condición en la empresa y por ser uno de los directivos ‘de la casa’ ya las conocía a la perfección, este no ha podido acometer ningún cambio sustancial, ni tampoco reunirse con los sindicatos de la firma puesto que, por el momento, no tiene el visto bueno del BCE.  

Oficina de Unicaja Banco. EFE
Oficina de Unicaja Banco. EFE

Por su parte, fuentes sindicales aseguran que, por su parte, siguen «pidiendo que se reanuden las negociaciones» y, además, explican que han trasladado esta petición al departamento de recursos humanos de Unicaja Banco. Pese a ello, por ahora no ha habido movimientos. Está por ver si con el aterrizaje –oficial- de Rubiales, los encuentros entre sindicatos y directiva se producen y comienzan a darse los cambios que la plantilla lleva pidiendo desde hace meses.  

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Alejandro Montoro

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