Iberdrola y Endesa buscan socios para su patronal eléctrica en plena guerra con el gas

Iberdrola, Endesa y EDP España buscan nuevos aliados en el camino de la electrificación. Así, en estos momentos se trabaja para que la patronal eléctrica a la que pertenecen, Aelec, sume nuevos socios en diferentes verticales de negocio. Todo ello, en un contexto donde otras alternativas energéticas también buscan su hueco en la agenda pública, como es el caso del petróleo y el gas. 

En concreto, Aelec estaría intentando ampliar su número de asociados con la incorporación de diferentes empresas que, una vez dentro de la organización, se distribuirían en diferentes nichos de negocio, tal y como ha podido conocer ECONOMÍA DIGITAL en fuentes del sector. 

En estos momentos, Aelec, que representa los intereses de las principales eléctricas españolas, solo tiene tres socios: Iberdrola, Endesa y EDP España. Es cierto que se trata de las dos primeras compañías por volumen de negocio y clientes en el segmento eléctrico; así como una de las grandes productoras de energía, pero debido a sus ámbitos de actuación, siempre parece que su representación se queda corta como para arrogarse todas las problemáticas del sector eléctrico español. 

De hecho, la actividad de Aelec ha crecido tanto en los últimos años, que su sentido ha traspasado al que se dotó en 2018 cuando se llevó a cabo el penúltimo gran cambio de la patronal. 

La mutación de Aelec 

La asociación de empresas eléctricas ha mutado y cambiado con los años, aunque los últimos grandes movimientos se han producido hace relativamente poco. En concreto, fue a las puertas del verano de 2018 cuando se ejecutó la gran transformación -y germinaron futuros roces-. 

La antigua Unesa pasó a denominarse Aelec. En ese momento la patronal tenía entre sus socios a Iberdrola, Endesa, Gas Natural (ahora Naturgy), EDP España y Viesgo. Este gran cambio generó ciertas rencillas entre las empresas, principalmente, por el sentido de la organización y, no menos importante, el papel que jugaría cada empresa. En concreto, querían mantener todo centrado en los negocios regulados en la distribución de redes y, asimismo, que Iberdrola no tuviera un protagonismo excesivo.  

Aunque esas pequeñas discrepancias son insignificantes con el bombazo que trajo el inicio de 2021: el adiós de Naturgy de Aelec, tercera compañía por número de clientes eléctricos. El contexto se enmarcó en el debate político y económico que generó el anuncio del Fondo Nacional de Sostenibilidad del Sistema Eléctrico (FNSSE). Se trataba de una medida que, de facto, utilizaría parte del dinero de los recibos del gas y la gasolina para financiar cuestiones relativas a las renovables. Algo que beneficiaba a las eléctricas y, lógicamente, era un rejón para la gasista presidida por Francisco Reynés. 

Ante estas circunstancias, y con el legítimo derecho de defender sus intereses, Naturgy se borró de Aelec y dejó solos a Iberdrola y Endesa que, además, había visto como el número se reducía ante la operación de concentración de EDP y Viesgo. Y todo ello sin conocer cuál será la posición asociativa de Repsol a nivel eléctrico una vez que se salió de la organización de pequeños comercializadores Acie.

Iberdrola y Endesa buscan refuerzos 

En todo este viaje, y pese a que Aelec muestra en sus principios una clara vocación de defensa por las cuestiones relativas a las redes de distribución, el suministro y los aspectos regulatorios, lo cierto es que, ahora mismo, tiene una visión de 360 grados como organización energética. 

De hecho, su presidenta, Marina Serrano, es una de las caras más visibles del sector energético por su alta exposición en foros, conferencias y congresos. Y, en el ámbito de actuación de Aelec, la patronal lleva meses con una intensidad frenética. 

A finales de 2022, por ejemplo, tuvo dos reuniones con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para fortalecer las relaciones institucionales, así como para analizar la situación del sector. De igual modo, Marina Serrano, representando a Aelec, ha estado presente en la subcomisión del Ministerio de Industria para abordar los retrasos en los despliegues de los puntos de recarga para vehículos eléctricos.  

Mientras, en el ámbito legal, la propia Aelec ha interpuesto las reclamaciones pertinentes referentes a los nuevos impuestos a las empresas eléctricas. 

Con todos estos condicionantes, ahora mismo se busca fortalecer verticales como la generación de energía, la movilidad eléctrica y otros tantos ámbitos donde han surgida empresas con bastante relevancia económica. Y eso en mitad de una pelea soterrada con el negocio del gas, al que no han tenido ninguna duda en señalar tanto Iberdrola como Endesa.