Gallego (IAG) advierte ante los analistas que la prohibición de vuelos cortos “dañará” la economía y el empleo

El CEO del holding defiende que el impacto de esta medida en sus aerolíneas será “muy limitado” y pone en duda su capacidad para reducir las emisiones contaminantes

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Luis Gallego, CEO de IAG, se planta contra la prohibición de los vuelos cortos incluida en el acuerdo de investidura entre el PSOE y Sumar. El primer ejecutivo de la propietaria de Iberia y Vueling advierte que esta medida supondría “un riesgo” que dañaría “la economía española, el empleo y el sector de la aviación”. 

Así se expresó en una reciente conferencia con inversores para presentar los resultados del tercer trimestre. A la espera de conocer los detalles de la propuesta, Gallego considera que la eliminación de estas rutas tendría un impacto “muy limitado” en la operativa del grupo hispanobritánico, pero, aun así, defiende que perjudicaría al sector.

Además, apunta, su eficiencia para reducir las emisiones de CO2 lanzadas a la atmosfera por los aviones, el principal argumento de los partidos liderados por Pedro Sánchez y Yolanda Díaz para tirar adelante esta restricción, sería “cercana a cero”. 

“Lo que pedimos es conectividad real con los trenes de larga distancia en Barajas y un fuerte desarrollo del combustible sostenible de aviación (SAF por sus siglas en inglés) en España”, añade. Este matiz ya lo apuntó la semana pasada ante la prensa, cuando abogó, también, por la implantación del denominado cielo único europeo, que supondría una reducción de las emisiones del 10%. 

Cinco rutas afectadas

Se trata de un protocolo que permitiría hacer trayectos de forma directa, sin tener que realizar desvíos para sobrevolar puntos de control, lo que supone un gasto extra de carburante. Su tramitación se encuentra estancada en Bruselas por el rechazo de países como Alemania o Francia.

Por ahora, la propuesta del PSOE y Sumar solamente implicaría reducir los vuelos domésticos que tengan una alternativa ferroviaria inferior a las dos horas y media. A priori, solamente afectarían a las rutas Madrid-Málaga, Madrid-Valencia, Madrid-Alicente, Madrid-Sevilla y Madrid-Barcelona. En este último caso, el impacto de la prohibición es incierta, dado que el trayecto directo dura, precisamente, dos horas y media.

Además, el tren de alta velocidad ya se está comiendo la cuota de mercado del avión en este tipo de trayectos. El presidente de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), Javier Gándara, recordó, tras conocerse la iniciativa incluida en el pacto de investidura, que la cuota de mercado del tren llega “al 80% e incluso al 90% en algunas rutas como el Madrid-Valencia».

ALA pide intermodalidad

En su opinión, los pasajeros solamente realizan estos trayectos en avión cuando necesitan llegar a los hubs de Madrid y Barcelona para coger un vuelo internacional, algo mucho más conveniente que tener que transportarse desde las estaciones de Atocha y Sants hasta los aeropuertos. Por eso, ALA asegura que, sin ofrecer una solución intermodal, los pasajeros cambiarán de ruta y viajarán a través de otros hubs como Ámsterdam o París. 

Más allá de su postura hacia la posible prohibición de vuelos cortos, Gallego actualizó a los analistas sobre la fusión de Iberia y Air Europa: sigue sin haber novedades. El consejero delegado de IAG aseguró que la resolución de la Unión Europea sobre la afectación de la operación en la competencia podría alargarse hasta finales del año que viene.

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