El PP tiene en la recámara un ‘plan nacional de energía’ por si debe negociar con Bruselas

El próximo 30 de junio el actual Gobierno debe remitir la revisión del PNIEC a Bruselas, y se harán apreciaciones... pero un nuevo Ejecutivo será el que negocie todo

El presidente del Partido Popular Alberto Núñez Feijóo. EFE/FERNANDO ALVARADO

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El documento más importante del entramado energético español, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), tiene la posibilidad de llegar a la Comisión Europea de una manera, volver con sus recomendaciones de otra, y terminar en Bruselas con una nueva visión. Todo en función de cuál sea el resultado de las próximas elecciones del 23-J. 

El recorrido previsto, una vez que se da por sentado dentro del sector que no habrá consulta pública sobre el PNIEC, será remitir el nuevo borrador a Bruselas el 30 de junio; y esperar hasta el 31 de diciembre para que la Comisión realice sus recomendaciones no vinculantes. Después, se remite el documento final a Europa, y entra en vigor el ‘nuevo’ PNIEC en julio de 2024. 

Pero el adelanto electoral ha hecho saltar por los aires estos planes y, en concreto, los que tenía trazados la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera. Básicamente, porque después de cuatro años de trabajo el Gobierno tenía la intención de dejar su impronta en el PNIEC.  

De hecho, el cálculo era perfecto, porque el periodo de recomendaciones de Europa estaba dentro de la legislatura actual. Por tanto, la ministra Ribera tenía todo bajo control. Incluso, el retraso que ha habido en la consulta pública era subsanable, puesto que se podría gestionar en la segunda mitad del año. Pero todo eso se ha ido al traste con el anuncio de elecciones. 

El PP tiene todo bajo control 

El 24 de julio puede haber un vuelco político en España. No sería de extrañar tras los últimos resultados que ha habido en las elecciones municipales y autonómicas. Por tanto, entra en toda lógica que el Partido Popular puede liderar el próximo gobierno de España

Ante este escenario, y según ha podido conocer ECONOMÍA DIGITAL en fuentes cercanas a la formación azul, ya tienen «un plan en la recámara». Es decir, si se da un cambio en el Gobierno, debería ser Alberto Núñez Feijóo, y el ministro que ponga al frente de energía, quienes piloten la actualización definitiva del PNIEC. 

En ningún caso, advierten dichas fuentes, se trataría de cambios radicales con respecto al borrador que se mandé a Bruselas el próximos 30 de junio. Principalmente, porque una de las consignas que tienen los Estados miembros es que deben ser planes que muestren una mayor ambición en materia de renovables y en el recorte de emisiones. Por tanto, esa debería ser la línea que seguirá el PP. 

Ahora bien, hay cuestiones que sí se verían revisadas a fondo, al menos bajo las premisas que el Partido Popular lleva anunciando desde hace meses. En concreto, las proyecciones sobre energía nuclear, cuyo apagón empieza en 2027, se verían modificadas. Eso, a su vez, impacta en otros aspectos como, por ejemplo, la necesidad de mayor almacenamiento o el aumento de renovables. Y es que la gestión de la red cambia si las nucleares empiezan a apagarse como está programado, o no. 

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