| 23J: Elecciones generales

Cinco años de «malas decisiones» implosionan Correos ante el 23J: «Estamos desbordados»

Los sindicatos denuncian que los trabajadores están "estresados" ante la convocatoria electoral y subrayan que el caos es consecuencia de los últimos cinco años de gestión

Una oficina de Correos. EFE/David Arquimbau Sintes

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La empresa pública Correos se ha visto en el centro del huracán en las últimas horas debido al caos a la hora de ejercer el voto por correo. Colas en las solicitudes, falta de personal suficiente y papeletas que no llegan han protagonizado el proceso prácticamente desde que arrancó, al día siguiente de la convocatoria electoral para el próximo 23 de julio.

Ayer terminó el plazo de solicitud para votar a distancia, pero aún queda la fase decisiva: la de llegada de las papeletas a los votantes para que puedan escoger y emitir su voto en la oficina de Correos. Un proceso clave pero que pilla a los empleados nuevos «desbordados» y «estresados», de acuerdo con los sindicatos consultados por ECONOMÍA DIGITAL. A esto se suma el hecho de que las nuevas contrataciones de refuerzo -20.000, según la empresa- aún no han llegado y a que unos 8.000 empleados están disfrutando de sus vacaciones estos días.

El Secretario federal del sector postal de UGT-Servicios Públicos, José Manuel Sayagués, asegura en conversación con este digital que tiene «fe de carbonero» en que el proceso va a salir bien. Confía en que los trabajadores de la empresa pública están dándolo todo, a pesar de estar completamente desbordados, para que los ciudadanos puedan emitir su voto. Pero recuerda que lo sucedido no es debido a una «avalancha» de votantes, sino que tiene su origen con la llegada de Juan Manuel Serrano a la Presidencia de Correos en 2018.

Correos, desmantelado a favor de la paquetería

«Hay problemas derivados del desmantelamiento de cinco años, provocado por Serrano y permitido por el presidente del Gobierno», explica el sindicalista. El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, nombró a quien había sido su jefe de gabinete como presidente de Correos y el nuevo dirigente quiso convertir la empresa pública en una competidora en el sector de paquetería a nivel mundial. Aunque fuera a costa, dice el responsable sindical, de restar recursos a la función de servicio postal universal que ejerce la empresa.

Ese «proceso de reconversión», dice el representante de UGT, pasó por derivar personal de las oficinas de Correos a la filial de paquetería, así como por el «desmantelamiento» de su estructura y de los altos cargos para nutrir al nuevo vector estratégico de la compañía. «El escenario es de una estructura debilitada terriblemente por ese señor que tiene que dar respuesta a una situación como esta del voto por correo. Tienes que tener una red de personas y estructuras que siempre ha funcionado como un reloj suizo», defiende.

Carteros desbordados y estresados

Fuentes de CCOO en la empresa pública coinciden en el diagnóstico e insisten en que se encuentran «desbordados». «Quienes sufrimos directamente somos los trabajadores que atendemos en oficinas, vamos por las casas… La ciudadanía nos pregunta», aseguran a este periódico desde el sindicato. «Hemos notado el malestar y estamos tranquilizando a la gente», explican, pero apuntan como responsable del caos al «pésimo gestor» que es el presidente de la compañía.

Con todo, inciden en que la profesionalidad de la plantilla va a permitir que los más de dos millones de solicitudes puedan tramitarse y llegar a buen puerto. «La plantilla está haciendo un esfuerzo enorme, varios miles de trabajadores han modificado sus vacaciones», defienden estas mismas fuentes.

En este sentido, desde el sindicato reclaman un mayor proceso de información sobre el procedimiento hacia los ciudadanos, así como de qué alternativas pueden tener para recibir la documentación en direcciones alternativas. Un proceso que debería impulsar la propia dirección empresarial, pero que hacen a motu proprio los empleados.

Correos se ha situado en el centro de la polémica en los dos últimos procesos electorales. En las últimas elecciones municipales del 28 de mayo, debido a la trama en torno al robo del voto por correo y de la compra de votos que salpicó a determinados territorios. Ahora, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, que fue presidente de la compañía durante el Gobierno de José María Aznar, puso en duda la limpieza del proceso. Así, pidió a los carteros que «con independencia de sus jefes repartan todos los votos antes de que venza el plazo para que los españoles» puedan votar.

Desde el PSOE, el líder del Gobierno, Pedro Sánchez, lamentó en una entrevista en la Cadena SER que el líder de la oposición esté generando desconfianza y desmotivación en los ciudadanos. «Como presidente garantizo que España va a tener un proceso democrático limpio, como hemos tenido siempre. España es una democracia plena, robusta, que está en los mejores ránkings sobre calidad democrática», zanjó.

También la vicepresidenta del Gobierno y líder de Sumar, Yolanda Díaz, respondió con contundencia al líder popular: «Le pediría al señor Feijóo que respete a las trabajadoras y los trabajadores de Correos, cerca de 50.000 trabajadores que vienen prestando sus servicios con absoluta dignidad».

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