Muchos jubilados ignoran que tienen este extra de 525 euros para su pensión
Esta ayuda a compensar uno de los problemas más importantes que tienen cientos de miles de jubilados que cobran la pensión no contributiva
El paso de la vida laboral a la jubilación tiene profundos cambios en la vida cotidiana, al cambiar las rutinas del trabajo por nuevas costumbres. Y también implica un reajuste en la economía, dado que el valor de las pensiones es demasiado ajustado para las necesidades de millones de españoles.
Para aliviar el ahogo económico que implica tener la pensión como único canal de ingresos la Seguridad Social cuenta con varias ayudas y prestaciones, aunque hay muchos jubilados que desconocen la existencia de varias de ellas, y que podría beneficiarles para llegar a fin de mes.
Uno de los puntos conflictivos de la economía doméstica es el coste del alquiler. Cabe recordar que la pensión media del Régimen General en España se encuentra en los 1.533,6 euros mensuales, aunque hay algunas mucho más bajas como la de los autónomos que está en 915,5 euros; o la de viudedad, de apenas 851,7 euros mensuales.
Frente a una pensión media de 1.533 euros, la renta promedio por un piso de 70 metros cuadrados en Madrid cuesta 1.190 euros
En cuanto a los alquileres, el precio medio del metro cuadrado en España está en 11,59 euros; o sea que por un piso pequeño de 70 metros cuadrados se debería pagar una renta de 811 euros. Claro, estos valores se disparan en ciudades como Barcelona, Madrid, con valores de 1.120 y 1.190 euros respectivamente para una vivienda de ese tamaño, indica un estudio de Fotocasa.
La ayuda para el alquiler
Analizando lo que se cobra de jubilación y lo que cuestan las rentas es evidente que a cientos de miles de jubilados que viven de alquiler no hay forma que le salgan los números.
A estas personas se dirige una de las ayudas más desconocidas por los beneficiarios del sistema previsional, que es una prestación conocida como ‘complemento de pensión para el alquiler de vivienda’.
Esta ayuda no se dirige a todos los jubilados, sino solo a los que reciben una pensión no contributiva, que no llega a los 500 euros mensuales (492,68 euros para ser exactos).
Se trata de una prestación de 525 euros que se paga de una sola vez, y que se destina exclusivamente para poder pagar la renta de la vivienda habitual.
Requisitos para el complemento del alquiler
Para poder recibirla, además de acreditar ser beneficiario de la pensión no contributiva, hay que demostrar que no se es propietario de una vivienda y que se está viviendo de alquiler, del cual hay que ser titular del contrato de arrendamiento.
Esta tiene que ser la vivienda habitual al menos durante los últimos 180 días.
Cabe precisar que la gestión de esta ayuda no se hace ante la Seguridad Social sino el Imserso, donde se puede tramitar en las delegaciones de cada comunidad autónoma o de Ceuta y Melilla.
Documentos a presentar
Previamente se puede descargar el formulario desde la web del Imserso para agilizar el proceso.
Entre los documentos que hay que presentar es un certificado catastral telemático que precisa que no se es propietario de una vivienda, una copia del contrato del alquiler, el padrón municipal y una declaración responsable donde se puntualice que no se tiene relación de parentesco hasta el tercer grado con el propietario del inmueble.
La ayuda se cobra una vez aprobada la solicitud, y hay tiempo hasta el 31 de diciembre para pedirla.
Las ayudas otorgadas por el Imserso
Según datos del Imserso el año pasado se abonaron 23.453 ayudas al alquiler, de los que seis de cada diez receptores contaban con la pensión no contributiva.
Pero si se toma la estadística desde otro ángulo, se revela que apenas el 5,28% de todos los jubilados que cobran una pensión no contributiva solicitaron este complemento al alquiler, por lo que seguramente habría miles de jubilados que no lo han hecho porque no saben de su existencia.