Incapacidad permanente: cuidado con las preguntas trampa de los médicos
Estas preguntas buscan información adicional sobre las dolencias y la capacidad de trabajo frente al cuadro de incapacidad
Oficialmente se llama Equipo de Valoración de Incapacidades, pero informalmente se lo conoce como el tribunal médico que aprueba o rechaza las solicitudes de incapacidad permanente, y que valora cuál es el grado de discapacidad del aspirante.
La pensión por incapacidad permanente es una ayuda económica que se otorga al trabajador que por causas de una enfermedad o de un accidente laboral no puede realizar sus labores de forma eficaz.
Este tribunal de especialistas revisará su historia clínica, los antecedentes del accidente o la enfermedad, y realizará las pruebas médicas para seguir adelante con el trámite.
Además de llevar toda la documentación solicitada, como historiales médicos y radiografías, es posible que el trabajador tenga que realizar movimientos físicos para confirmar la solicitud de incapacidad permanente.
Incapacidad permanente: cuidado con las preguntas trampa de los médicos
Al momento de la entrevista es posible que el trabajador se ponga nervioso. El consejo de los especialistas es que se relaje, que responda con naturalidad pero siempre con la verdad.
El trabajador tiene que responder con naturalidad, pero siempre con la verdad
Y hay preguntas que se puede considerar como ‘trampa’, aunque los miembros del tribunal destierren ese calificativo; pero lo que buscan es encontrar informaciones que vayan más allá de las respuestas habituales.
Las preguntas clave
Entre las preguntas que parecen inocentes y no lo son tanto está la habitual ‘¿Qué tal, cómo estás?’ a modo de saludo. La idea, además de ofrecer un ambiente más amigable, es conocer el estado de ánimo del paciente.
Es posible que la primera pregunta formal sea ‘¿Has mejorado de la enfermedad o lesión el tiempo que llevas de baja?’, para conocer la evolución de la enfermedad o problema físico antes de conceder la pensión de incapacidad.
Si los médicos preguntan ‘¿Has venido solo o acompañado?’ es porque quieren saber si la persona afectada por la incapacidad tiene personas cercana que le puedan ayudar, así como su posible grado de autonomía.
Al consultar ‘¿Cuál es tu puesto de trabajo?’ o ‘¿qué tareas realizas?’ no solo se busca tener más precisión sobre las funciones laborales, sino también saber si puede realizar tareas diferentes a las habituales o con una intensidad menor.
Otras preguntas, que en ocasiones se reformulan de una manera diferente, pueden ser:
. ¿Estás de acuerdo con lo que la mutua o tu especialista afirma sobre tus dolencias?
. ¿Cómo te afectan tus síntomas o secuelas?
. ¿Por qué etapas ha pasado tu patología o lesión?
. ¿Por qué crees que necesitas una incapacidad permanente?
. Explica los problemas que tienes al realizar tus tareas laborales.
El veredicto y la revisión de la incapacidad
En base a estas respuestas, y con la documentación aportada, el tribunal dará su veredicto sobre el pedido de incapacidad permanente y, en caso positivo, establecerá el grado de discapacidad para poder cobrar la pensión.
Igualmente, estas preguntas pueden volver a realizarse cuando el trabajador tenga que concurrir a las revisiones periódicas, para determinar si puede reincorporarse a su empleo.