Guerra entre Gobierno y Generalitat en plena negociación de investidura por un macroproyecto renovable en Aragón
Transición Ecológica finaliza la tramitación ambiental del proyecto aragonés de Forestalia, mientras la Generalitat quiere frenar su conexión con Cataluña
Choque entre el Gobierno y la Generalitat de Cataluña durante las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez por un macroproyecto eólico y fotovoltaico en Aragón. El Ministerio de Transición Ecológica finaliza la tramitación ambiental de la inmensa iniciativa renovable de Forestalia, mientras el Govern intenta frenar su conexión con la comunidad por su impacto en el medio ambiente.
Este miércoles, la Dirección General de Calidad y Avaluación Ambiental ha publicado en el Boletín Oficial del Estado (BEO) las Declaraciones de Impacto Ambiental (DIA) favorables de los últimos parques incluidos en este proyecto que le quedaban, un avance importante dentro del largo camino administrativo que suponen las instalaciones renovables. En estas resoluciones, se da luz verde a 74 aerogeneradores con una potencia conjunta de 440 MW.
Los nuevos dictámenes se suman a los más de 20 ya emitidos por Moncloa, que dan el ‘ok’ provisional a la construcción de 107 instalaciones con una capacidad total de 3.943 MW, por lo que se ha recortado a la mitad el proyecto de Forestalia, que preveía 146 molinos y placas distribuidos por todo Aragón con una potencia de 6.716,08 MW. El grupo ya tiene, además, la autorización administrativa para alzar 21 aerogeneradores.
Pero, ¿qué tiene que ver la Generalitat en un proyecto que supera sus fronteras? Forestalia prevé suministrar electricidad también a Cataluña con la energía generada en estos parques a través de la instalación de varias líneas de alta tensión que cruzarían el territorio, algo que el Govern y varios ayuntamientos catalanes rechazan por sus efectos negativos en la biodiversidad.
El proyecto de la compañía presidida por Fernando Samper incluye la construcción de tres líneas para evacuar la energía hasta distintas subestaciones eléctricas de Cataluña. La primera conectará los municipios de Grañán (Huesca) y Pierola (Barcelona), la segunda irá de Valmuel (Teruel) a Begues (Barcelona) y la tercera de Laluenga (Huesca) a Isona (Lleida). Todos ellos se encuentran en avanzados trámites administrativos y aportarían a Cataluña miles de MW de electricidad entre eólica y solar.
Sin embargo, la Generalitat ha emitido distintos informes desfavorables a estos proyectos. Este mismo miércoles, el conseller de Acció Climàtica, David Mascort, ha afirmado en el pleno del Parlamento que el Govern de ERC está preparando un recurso contra la autorización por parte del Gobierno de la línea de alta tensión que va de Laluenga a Isona.
Este tipo de trámites son competencia del Estado, pero la decisión final del Ejecutivo central estará condicionada por un último informe de la Generalitat para evaluar sus consecuencias en la flora y la fauna, algo que ha sobresaltado al conseller catalán. “¿Es una forma de presionarnos para hacer un informe favorable? Es raro”, ha añadido, mientras ha atacado a Moncloa por “querer colar su modelo por la puerta de atrás”.
Impacto en la fauna
Hace unas semanas, después que se anunciara que la línea eléctrica Grañán-Pierola había recibido una Declaración de Impacto Ambiental favorable emitida por el ministerio de Teresa Ribera, Mascort ya anunció que el Govern “estudia emprender todas las medidas legales y administrativas a su alcance”. Según el republicano, el proyecto tiene “informes sobre biodiversidad negativos”, alegando que la propia documentación de la empresa admite, por ejemplo, que afectaría a 13 kilómetros de espacios críticos para el águila perdicera.
“Estos proyectos ponen en riesgo la transición hacia un nuevo modelo energético más justo, sostenible y democrático que vive Cataluña, porque hipotecan grandes extensiones de territorio para hacer unas líneas eléctricas que solo benefician a un privado”, sentenció.
Estos choques llegan en plenas negociaciones de Esquerra Republicana y el PSOE para volver a investir al presidente Sánchez, unos encuentros que van a tener que acelerarse, dado que, tras el encargo del Rey de formar gobierno, el reloj ha empezado a contar.
Por lo que respecta a Cataluña, hay que recordar que la comunidad autónoma va con retraso en la transición energética y en el despliegue de tecnologías e infraestructuras para producir energía limpia por las reiteradas barreras administrativas que sufre el sector. En los primeros seis meses del año, la región solo produjo un 14% de la electricidad total a partir de fuentes renovables.