Así te afecta en la Declaración de la Renta tener dos pagadores
El plazo para presentar la Declaración de la Renta correspondiente al año 2022 se abrirá en abril
A pocos meses para iniciar la campaña de la Declaración de la Renta de 2022, comienzan a surgir las dudas relacionadas con este trámite. Después de presentar los resultados económicos de ese año, el contribuyente habrá de aportar una cuantía económica, si la declaración le sale «a pagar», o bien, recibirá una devolución por lo pagado a lo largo del año a través del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), si le sale «a devolver».
Las fechas clave de la campaña 2023 ya se han dado a conocer. El plazo para presentar el borrador de forma online comenzará el 11 de abril, mientras que las personas que quieran hacer el trámite por teléfono habrán de esperar hasta el 5 de mayo y los contribuyentes que tengan intención de formalizarlo presencialmente hasta el 1 de junio. En cualquier caso, el 30 de junio terminará el plazo para presentar el documento a través de cualquiera de estos canales.
¿Cómo afecta tener dos pagadores en la Declaración de la Renta?
Una de las dudas más habituales está relacionada con el número de pagadores y su impacto en la tributación por IRPF. Por ejemplo, pueden encontrarse en esta situación las personas que han cambiado de trabajo en un mismo año, o que tienen diversos empleos.
Los ingresos percibidos a lo largo del año son fundamentales a la hora de determinar cuanto deberá pagar un contribuyente por el IRPF. Si cobró menos de 22.000 euros durante un año de un solo pagador no deberá hacer la Declaración de la Renta. Sin embargo, si tuvo dos pagadores, será necesario presentar el borrador si los ingresos brutos exceden los 14.000 euros y el segundo pagador le ha abonado más de 1.500 euros.
Conviene tener en cuenta que existen algunos supuestos en los que los ingresos extra no se consideran de un segundo pagador. Por ejemplo, las pensiones compensatorias como la de alimentos de un excónyuge, o bien, la subrogación laboral o un pago delegado, como sucede en los casos de incapacidad temporal.
Tener más de un pagador no significa que se tenga que tributar más a Hacienda, pero sí es posible que las retenciones estén por debajo de lo que corresponde, y la declaración salga a pagar. En este sentido, es posible que si los ingresos aumentan por algunos trabajos extras, se salte de tramo fiscal y se tenga que tributar por un porcentaje más elevado.