Colau se resigna tras las calabazas del PSC a compartir alcaldía y se despide del pleno de Barcelona
El último pleno se ha celebrado solo tres días antes de la investidura y en plenas negociaciones para formar gobierno en Barcelona
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. EFE/Marta Perez
La alcaldesa en funciones de Barcelona, Ada Colau, se resigna tras las calabazas del PSC y ERC a compartir alcaldía para retener el Ayuntamiento de la ciudad condal y se ha despedido este miércoles del pleno de Barcelona.
«He sido presidenta durante ocho años y está por ver el alcalde y el gobierno que salga el próximo sábado o los próximos meses. En todo caso, seguro que no volveré a presidir el pleno«, ha dicho Colau en su última intervención tras una sesión en la que se han despedido los 22 concejales que no continuarán.
El último pleno se ha celebrado solo tres días antes de la investidura y en plenas negociaciones para formar gobierno en Barcelona. Cabe recordar que en las elecciones generales del 28 de mayo, ganó en votos y concejales el candidato de Trias per Barcelona, Xavier Trias.
ERC y PSC rechazan la propuesta de Colau
Este martes, Colau propuso repartirse la alcaldía con los candidatos de PSC, Jaume Collboni, y de ERC, Ernest Maragall, retener la alcaldía de Barcelona y evitar que Trias sea el nuevo alcalde de la capital catalana, una propuesta rechazada por los socialistas y los republicanos.
Los socialistas han hablado por boca de su jefa de negociaciones, Laia Bonet, que ha argumentado que en Barcelona si bien «se ha votado cambio y se ha votado progreso (…) propuestas o fórmulas como la presentada esta mañana -por Colau- no serían entendidas por los votantes progresistas y no contribuirían a la estabilidad ni el rigor que el Ayuntamiento de Barcelona y su ciudadanía merece».
Por su parte, fuentes de ERC consultadas por Efe han sostuvieron que la propuesta de Colau no es válida porque «no está consensuada con el PSC y, por tanto, no es real», y posteriormente Maragall ha tomó un café con Trias en una señal de que los republicanos siguen abiertos a otras posibilidades, en la dirección apuntada por los máximos dirigentes de ERC, Oriol Junqueras y Pere Aragonès.
