Stellantis y la automoción gallega baten su récord histórico de ingresos en plena crisis de suministros
El balance del año de la automoción gallega pone algunas paradojas sobre la mesa. El sector que lidera Stellantis y su industria auxiliar ha facturado 11.550 millones, su récord histórico, a pesar de las turbulencias que lo amenazan, que tienen como muestra más visible los parones de actividad por los problemas en el suministro de componentes y la contracción del mercado. Por otra parte, este récord en la cifra de negocio no ha traído consigo una mayor ocupación. Al contrario, los empleos del sector descienden en Galicia por segundo año consecutivo.
Los datos recopilados por CEAGA (Clúster de Empresas da Automoción de Galicia) muestran que la facturación se incrementó un 3% respecto a 2021, mientras que las exportaciones también marcaron su mejor dato histórico con 8.220 millones de euros, lo que supone un leve incremento del 0,7% con respecto al año anterior. Las exportaciones de la industria automovilística representan el 27,5% de todo lo que exporta Galicia.
También subieron las inversiones, aunque están todavía lejos de sus mejores años. Ascendieron a 134 millones, 10 millones más que en 2022, pero la mitad que en 2018, por ejemplo. En el periodo entre 2016 y 2019, antes de la pandemia, siempre habían superado los 200 millones.
Más negocio, menos empleo
Stellantis lidera un sector que es el más relevante en cuanto a fabricación del conjunto de España. La factoría de Vigo ensambló el 19% de los coches que se produjeron en el Estado, situándose por encima de SEAT Martorell (17%) y de la propia planta de Stellantis en Zaragoza (17%).
Este liderazgo no sirvió para incrementar el empleo en el sector. Trabajaban en la industria gallega de la automoción 23.200 personas a cierre de 2022, 250 menos que a cierre del ejercicio anterior y 1.780 menos que en 2020.
