Monbus encadena disgustos con el autobús escolar
Los éxitos de Monbus, el principal grupo gallego de transporte de viajeros por carretera, en las licitaciones públicas están acabando en los tribunales. Sucedió con la licitación del transporte escolar de la Xunta, donde la compañía que dirige Raúl López fue la principal adjudicataria, pero vio como el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia anulaba varios de los contratos por superar el número de lotes que puede llevarse una misma licitadora. Ahora, los competidores de Monbus en Valencia también han llevado a la empresa a los tribunales, donde aguardan un resultado parecido, aunque por motivos diferentes.
Como explicó este medio, el grupo gallego se presentó al concurso de la Generalitat para el servicio de transporte escolar de los centros públicos en la provincia de Valencia con medio centenar de autobuses que ya asignara a otros servicios en Galicia. A través de la UTE Escolar Valencia V5, la compañía de Raúl López consiguió adjudicarse uno de los 18 lotes para los próximos tres cursos por 21 millones, una rebaja de cuatro millones sobre el presupuesto de licitación.
Monbus ya consiguió salvar un recurso administrativo contra su candidatura, pero el mismo competidor que lo había presentado, un consorcio formado por 70 empresas de la Comunidad Valenciana, decidió recurrir a los tribunales. Según avanza Valencia Plaza, la alianza liderada por Transvia Go ha presentado un recurso contencioso-administrativo contra la adjudicación a Monbus. Se formaliza contra la resolución previa y desestimatoria del Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (TACRC).
La compatibilidad de horarios
El consorcio valenciano, denominado Valencia 23 y ganador en el resto de lotes, considera que Monbus ha incumplido los pliegos. Revisó las matrículas presentadas al concurso y comprobó que coincidían con las presentadas en Galicia, además de otros vehículos que prestan servicio para la Generalitat de Cataluña y para el Gobierno central. No hay problema en que un mismo autocar tenga asignados varios servicios, salvo que se produzca una incompatibilidad de horarios. Y ahí está el meollo de la cuestión.
El TACRC desestimó los argumentos de los competidores valencianos de Monbus después de que la compañía lucense presentara una declaración de responsabilidad en la que aseguraba que no había incompatibilidad horaria entre los distintos servicios. Las empresas de la Comunidad Valenciana, sin embargo, ponen en duda que, con semejante distancia geográfica (Valencia y Galicia están a más 700 kilómetros), un mismo autobús pueda ejercer ambas tareas.