La economía circular avanza en el Atlas Gallego de la Empresa Comprometida
La circularidad se instaló en el Atlas Gallego de la Empresa Comprometida desde el minuto uno, en su primera edición, y gana peso en esta tercera entrega. Un ejemplo: siguen siendo minoría las empresas que declaran contar con la Certificación Residuo Cero, pero su número se multiplica por tres frente a la edición anterior, la segunda.
La economía circular aplicada en las empresas busca alargar el ciclo de vida de los productos a través de su reutilización, reparación, renovación y reciclaje. Se trata de un modelo productivo orientado a generar cero residuos. El Atlas mide esta variable a través de cinco atributos, presentes en las empresas en diferentes proporciones. Cabe destacar que, frente a las dos únicas empresas que en la edición anterior tenían Certificación Residuo Cero, en esta edición 2022 el número ha pasado a seis compañías.
Un componente ético
El modelo de la economía circular persigue invertir la pirámide actual de la gestión de residuos, maximizando las acciones de prevención y valorización de residuos (reutilización, reciclado o valorización energética). El desperdicio de alimentos, por ejemplo, es una problemática que, además de consecuencias ambientales, sociales y económicas, tiene un gran componente ético, ya que el 9% de la población mundial padece hambre.
Las empresas que alcanzan mayor grado de excelencia en el apartado de la economía circular del Atlas Gallego de la Empresa Comprometida corresponden a sectores como la alimentación, distribución, tecnología, finanzas y textil, que curiosamente tiene un fuerte impacto en el medio ambiente.
Los avances en esta edición
De los resultados generales del análisis se puede extraer que el 65% de las empresas del Atlas declara utilizar principalmente insumos y embalajes reciclables o de base biológica. Ese porcentaje era del 63% en la pasada edición. Un ligero avance, por tanto. Y un 53,3% cuenta con un plan o programa de sustitución de materias primas o productos de origen fósil por otros de carácter biológico o renovable. En la anterior entrega ese peso se reducía al 41%, lo que da cuenta de la sustancial progresión en este caso.
Como dato, de las sesenta compañías y grupos empresariales que se sometieron al chequeo del Atlas Gallego de la Empresa Comprometida, un 78,3% asegura que recupera la mayor parte de los materiales sobrantes, subproductos o residuos para su uso futuro. Y el 55% declara que exige a sus proveedores la aplicación de medidas para reducir el uso de plásticos y materiales no reciclables.
Copasa, Gadisa, Hijos de Rivera, Cobre San Rafael y el Instituto Galego de Promoción Económica (Igape) se encuentran entre los patrocinadores de Galicia Smart Business, proyecto de Economía Digital Galicia en el que se enmarca el Atlas Gallego de la Empresa Comprometida, ya por su tercera edición. También al abrigo de Galicia Smart Business han nacido otros proyectos, como los Observatorios de Economía Digital Galicia, puntos de encuentro de debate y entrevistas.