La buena salud de Freire Hermanos, el germen de Megasa en manos de María Montalvo
A falta de conocer los resultados correspondientes al complejo ejercicio 2022, las sociedades que orbitan alrededor de Megasa, la primera siderúrgica gallega, aprobaron con nota 2021 aún a pesar del alza de las materias primas y la energía (a finales de ese año ya comenzaron los parones de producción de las grandes consumidoras electrointensivas). Freire Hermanos, germen del grupo con sede en Narón, no fue una excepción. Fundada en el año 1933, la compañía, que se dedica a la comercialización, distribución y transformación de productos metalúrgicos, vio cómo su cifra de negocio crecía más de un 50% mientras su beneficio neto se duplicaba.
El incremento positivo en sus resultados se produjo inmediatamente antes de que Freire Hermanos llevase a cabo un proceso de sucesión de libro. Y es que, a finales del pasado año, tal y como adelantó Economía Digital Galicia, la abogada María Montalvo Freire, nieta del fundador del grupo, reemplazó en la presidencia de la compañía a su tío, Enrique Freire Arteta, cabeza visible del holding familiar sostenido sobre el metal.
Disparó ingresos y beneficios
Según los datos del Registro Mercantil, hasta 2021, María Montalvo ejercía como consejera en Bipadosa, sociedad cartera de la que cuelgan dependientes como Metalúrgica Galaica (Megasa) y Megasa Siderúrgica, además de la propia Freire Hermanos, fundada por Bartolomé Freire Lago hace 90 años.
Con unos activos que se incrementaron de los 18,9 a los 24 millones de euros y un patrimonio neto que pasó de 15 a cerca de 19 millones, Freire Hermanos finalizó 2021, último ejercicio del que hay datos disponibles, con un beneficio neto de 3,4 millones de euros, más de doble de lo conseguido el año de la pandemia, cuando las ganancias se quedaron en 1,5 millones. El resultado de explotación, el propio de la actividad de la compañía, alcanzó los 3,67 millones. Los ingresos de la sociedad crecieron más de un 50%, hasta los 32,3 millones.
Precios de venta más altos
Explican los administradores de la compañía en su informe de gestión que el ejercicio, a pesar del incremento de resultados, no fue sencillo. Estuvo marcado “por las diferentes olas pandémicas que continuaron impactando en el tránsito de personas y mercancías, por las tensiones en las cadenas de suministro, las dificultades logísticas y por el precio de las materias primas, transporte y energía, que provocaron un notable incremento de la inflación en todo el mundo”. No obstante, indican que “en este escenario, se produjo un incremento en los costes que impactó al alza en los precios de venta de los productos que comercializa la sociedad, lo que unido al esfuerzo de contención de costes permitió el aumento de los márgenes de venta”.
Destacan además que la sociedad ahora presidida por María Montalvo “no tiene prácticamente deuda bancaria y su pasivo corriente representa el 23% del activo corriente”, algo que da muestra de su buena salud. “Cabe mencionar la buena gestión de la administración de la compañía, el apoyo prestado por su equipo directivo y la contribución personal realizada por todos sus empleados”, indican los gestores de una compañía con cerca de medio centenar de trabajadores.
La mejoría de las cifras de Freire Hermanos se reprodujo en otras sociedades dependientes de Bipadosa. Por ejemplo, Megasa Siderúrgica, sociedad de control de la factoría del grupo en Narón, con unos 150 empleados, obtuvo unos beneficios de 25,4 millones de euros, ocho veces más que el año de la crisis del Covid. También Megasider, la fábrica zaragozana que los Freire compraron a ArcelorMittal, vio cómo su resultado neto se disparaba de 3,5 a 30,5 millones de euros, nueve veces más.