Jaque a Euroespes: el auditor duda de su viabilidad tras entrar en preconcurso
Euroespes disparó sus números rojos antes de entrar en preconcurso de acreedores. La biotecnológica que preside Ramón Cacabelos ha remitido sus cuentas anuales correspondientes al ejercicio 2022 al BME Growth, índice en el que cotiza desde hace más de una década. En ellas revela que su facturación se estancó en los 3,3 millones de euros (apenas 7.000 euros más que el año anterior) y que sus pérdidas se multiplicaron por seis.
En concreto, estas se elevaron desde los 183.400 euros alcanzados en 2021 hasta los 1,13 millones en 2022 después de que el resultado bruto de explotación (ebitda) se incrementase desde los 238.000 euros hasta los 1,38 millones de euros.
Ante esta situación y la presencia de una deuda de 4,8 millones de euros de los cuales 4,3 millones se corresponden a entidades financieras, la compañía decidió presentar preconcurso de acreedores ante el Juzgado de lo Mercantil de A Coruña a finales de abril. En este sentido, la propia auditora de la compañía (EY) advierte de «una incertidumbre material que puede generar dudas sobre la capacidad del grupo para continuar como empresa en funcionamiento«.
Los planes de Euroespes
Desde EY arrojan más sombras sobre una Euroespes que, según revela la auditora en su informe, ha registrado un deterioro de activos por valor de 270.000 euros en un año en el que la firma ha logrado dos nuevos contratos de distribución de productos nutracéuticos en México y Uruguay, que se espera que entren en vigor en la recta final del año.
Además, la compañía prevé que su segundo centro médico (el inaugurado en el distrito madrileño de Chamberí) no opere a pleno rendimiento hasta la segunda mitad del año. Allí ofrecerá sus servicios para predecir el riesgo de sus clientes de padecer una serie de enfermedades como el Parkinson, el Alzheimer, la demencia senil y la esclerosis múltiple a partir de un test genético.
Euroespes, uno de los seis representantes gallegos del BME Growth, ha perdido el 24% de su valor en bolsa en lo que va de año. De este modo, su capitalización ha quedado reducida hasta los 4,5 millones de euros. El fondo Moira Capital (de Javier Loizaga) y el propio Ramón Cacabelos son los máximos accionistas de la firma con sede en Bergondo al controla una participación del 44,2% y el 11,3%, respectivamente.
