Inveravante sanea su división de alimentación y bodegas con 12 millones
Inveravante, el holding que levantó Manuel Jove Capellán tras la venta de Fadesa a Martinsa, es hoy un grupo diversificado que ha vuelto a beneficios y mantiene una estrategia de retorno al ladrillo pero sin excesos, y con patas como la energía y la alimentación, que fueron apuestas decididas del empresario, fallecido en mayo de 2020. Hoy sus hijos, Felipa y Manuel Ángel, pilotan una compañía que ha decidido redoblar su apuesta con saneamientos en determinadas áreas.
Es el caso de la división de alimentación, con intereses en el área de vinos y quesos. Inveravante Selecta, la filial que controla este área de negocio, ha activado una reducción de capital por importe de 12 millones de euros. Lo hace para compensar pérdidas. El capital de la filial queda ahora fijado en 24 millones de euros, según las anotaciones del Registro Mercantil.
Pérdidas acumuladas
Dominio de Atatua, Viña Nora, Óbalo, Naia o Pazos del Rey, entre otras, son algunas de las referencias del grupo en el segmento de las bodegas. La filial Inveravante Selecta acumula pérdidas que el propio grupo califica de históricas, ya que en los últimos ejercicios presenta un ebitda (beneficio antes de intereses, impuestos y amortizaciones) negativo que no llega al millón de euros. Es el caso de 2021, último ejercicio con cuentas presentadas en el Registro Mercantil.
Al cierre de 2021, Inveravante Selecta firmó un resultado de explotación de 824.000 euros, frente a unas pérdidas superiores a los tres millones registradas un año antes. Los ingresos de la filial alimentaria, sin embargo, se han mantenido relativamente estables, ya que en 2021 se situaron en algo más de 11 millones de euros, ligeramente por encima de los 10 millones obtenidos en 2020. La compañía contaba en ese momento con un patrimonio de 23,7 millones, para un activo total de 42,7 millones de euros.
Dimensiones del grupo
El grupo integra divisiones como la hotelera, inmobiliaria y energía, que son su verdadero fuerte, frente al relativo peso de la alimentación. El balance consolidado de Inveravante presentaba a 31 de diciembre de 2021 un activo total de 1.940 millones de euros. El patrimonio neto ascendía a un total de 1.347 millones, lo que representa un 69% del total activo.
El grupo volvió a beneficios en 2021, cuando anotó unas ganancias de 10,9 millones, frente a unas pérdidas netas de 47,4 millones del ejercicio precedente. Y lo hizo con menores ingresos, ya que su facturación se situó en unos 176 millones de euros el año pasado, sustancial retroceso sobre los 203 millones del 2020.