Récord de ingresos de Inleit, Lactalis, Capsa y Celta antes del recorte a los ganaderos
Inleit, la factoría de Curtis, se ha sumado a la lista de industrias del sector lácteo que cerró el pasado ejercicio con récord de ingresos, un efecto de la etapa inflacionista y el continuo incremento de precios que se vivió durante el ejercicio. Entre los grupos que más leche recogen en Galicia, Lactalis, Capsa o Celta también llevaron su facturación a máximos históricos, lo que han aprovechado las organizaciones agrarias en sus campañas contra los recortes en los contratos firmados con las granjas hasta otoño y que, según denuncian, se han firmado todos a la baja. Parte de esas industrias, como la multinacional francesa y el dueño de Larsa y Central Lechera Asturiana, han sufrido también una caída de beneficios y márgenes, al no poder trasladar el incremento de costes de producción al precio de los lineales.
El caso de Inleit, filial gallega del grupo Liasa, es distinto, ya que al récord en la cifra de negocio se sumó otro en ganancias. La compañía cerró el ejercicio con unos ingresos de 188 millones, 65 millones más que el año anterior y el triple de lo que facturaba en 2020. El acelerón en la facturación se vio correspondido con unos beneficios de 7,3 millones frente a las pérdidas por el mismo importe que había registrado en 2021. De hecho, la antigua Goodleit generó números rojos desde prácticamente su fundación, en 2016, aunque no sería hasta 2019 cuando inició su actividad comercial.
«La sociedad ha experimentado un incremento en sus ventas de un 52,% con un incremento paralelo del 47% en el consumo de mercaderías, pasando así el margen bruto de un 21% en el ejercicio 2021 a un margen del 24% en el ejercicio 2022«, explica Inleit en su informe de gestión. Su modelo de negocio está llamado a aportar innovación y valor añadido al sector lácteo gallego y contó con un importante apoyo, en forma de subvenciones, de la Xunta.
Aproximadamente una parte importante de las operaciones de Inleit, concretamente un 28% de los ingresos en 2022 y un 38% en 2021, las realiza con empresas del grupo Liasa, que el año pasado obtuvo 14,5 millones de beneficio.
Récords de ingresos y caídas de beneficio
El récord de ganancias de Inleit no ha sido la tónica dominante en la industria láctea. Consiguieron mejorar sus ganancias Leche Celta, que pasó de pérdidas a ganar 811.700 euros en 2022, y previsiblemente Lence, ya que hizo público un ebitda de 9,5 millones, el doble que el año anterior. No así el principal operador del mercado, Lactalis, pues las ganancias de la división española del grupo cayeron un 10,7%; ni tampoco Capsa, que encajó un retroceso en el resultado del 73%, hasta los 5,1 millones de beneficio.
Con excepción de Lence, que llegó a facturar más que los 210 millones del año pasado en la etapa de Jesús Lence, el resto de grupos batió su récord de ingresos en el ejercicio: Lactalis Iberia alcanzó los 1.513 millones; Capsa, los 895 millones; Leche Celta, los 234,7 millones; e Inleit los mencionados 188 millones.
Estos resultados precedieron a la progresiva bajada de precios por la leche en origen que ha aplicado la industria a lo largo de 2023 y que ha elevado las tensiones con las organizaciones agrarias, al entender estas que los contratos a la baja no están justificados por una caída de precios en los lineales. Unións Agrarias, que cifró el recorte hasta otoño en casi 200 millones, aseguró en un comunicado que «las sucesivas rebajas impuestas de manera unilateral por las industrias se producen sin que exista ninguna razón de mercado que las avale y, lo que es peor, totalmente al margen de la evolución de los costes».