Greenalia dispara ingresos y beneficios e hipoteca su planta de biomasa de Teixeiro
Nuevo empujón de Greenalia a su cuenta de resultados. La compañía que capitanean José María Castellano y Manuel García Pardo ha cerrado el ejercicio 2022 con un récord tanto de ingresos como de beneficios tras dejar atrás el golpe del Covid-19.
Y es que la firma coruñesa se ha situado a un paso de entrar en el selecto grupo de empresas gallegas que facturan más de 100 millones de euros. En concreto, su cifra de negocio se disparó un 120,7%, al pasar de los 43,07 millones de euros registrados en 2021 a los 95,07 millones en 2022.
El récord de Greenalia
Esta ganancia de tamaño se ha dado en un ejercicio marcado por la puesta en marcha de tres nuevos parques eólicos. Se trata del Alto da Croa (7,3 megavatios), Alto da Croa II (10,4 megavatios) y el Monte Tourado (10,4 megavatios), que se suman a los otros dos que ya estaban en funcionamiento (el Miñón, de 24 megavatios, y el parque Ourol, de 22,5).
A la entrada en operación de estas instalaciones se ha unido el acelerón en la planta de biomasa de Teixeiro. Esta se encuentra, según revela Greenalia en las cuentas anuales que ha presentado ante el Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF), «en niveles de producción en línea con el plan de negocio de la misma».
«El negocio energético eólico continúa su actividad de producción, con los cinco proyectos de Eolo Moc funcionando a plena capacidad durante todo el ejercicio (…). Hay que destacar la explotación a mercado (merchant) de estos proyectos, lo que está permitiendo obtener precios de mercado superiores a lo incluido en el plan», destaca la compañía.
Además, la firma añade que «la planta de biomasa (Curtis-Teixeiro) ha continuado exportando energía» y «mejorando sus niveles de producción». Es por ello que el beneficio bruto de explotación (ebitda) se ha elevado hasta los 64,9 millones de euros tras un ascenso que se ha repetido con el beneficio neto. Este ha escalado un 36,1% y ha pasado de 12,1 a 16,4 millones de euros.
Roza los 400 millones en deudas financieras
La compañía ha dado este nuevo salto en un 2022 marcado por la opa de exclusión por parte de Smarttia Spain y Alazady España (instrumentos de Manuel García Pardo y José María Castellano) para sacar a la compañía de bolsa. Greenalia puso punto y final a una etapa de casi cinco años en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) -ahora rebautizado como BME Growth- en la cual ha efectuado su transición del sector forestal al energético.
La empresa coruñesa construye en la actualidad parques eólicos y solares de 1.189 megavatios y tiene otros 124,6 megavatios ya en operación. Se trata de los 50 de la planta de biomasa de Teixeiro (Curtis) y los 74,6 de sus cinco parques eólicos. Precisamente sobre estos activos la compañía ha concedido un derecho de prenda a las «entidades financiadoras».
«El valor neto contable de estos activos en la sociedad poseedora de los mismos al 31 de diciembre de 2022 asciende a 125,1 millones de euros» en el caso de su proyecto de biomasa en Curtis, en donde, además, ha comprado un total de 12 parcelas. «Asimismo, el grupo ha concedido un derecho de prenda sobre los activos en desarrollo del proyecto de Eolo Moc (cinco parques eólicos de una potencia total de 74,22 megavatios) a las entidades financiadoras de dicho proyecto. El valor neto contable de estos activos en las sociedades poseedoras de los mismos al 31 de diciembre de 2022 asciende a 82,1 millones de euros», destaca la compañía, en referencia a sus cinco parques eólicos en operación.
El crecimiento en facturación, beneficios y cartera de pedidos ha venido acompañado de unas mayores necesidades de recursos para la puesta en marcha de unos proyectos que demandan altas cantidades de inversión. Es por ello que la deuda de Greenalia ha visto cómo sus pasivos financieros han repuntado desde los 359,4 millones de euros al término de 2021 hasta los 397,4 millones al cierre de 2022.
