El corredor del hidrógeno que reclama Galicia dispara las inversiones de Enagás y Naturgy en León
La planta de hidrógeno de La Robla, una inversión de 485 millones presentada por Naturgy y Enagás Renovable la pasada semana, se ha convertido en la mayor iniciativa de hidrógeno renovable del corredor Vía de la Plata y una de los primeros centros productivos a gran escala del H2Med. La ubicación de las instalaciones en uno de los principales nodos de la red que el Gobierno impulsa en Europa con la intención de obtener la financiación de los PCI (proyectos de interés común) ha hecho que los promotores redimensionaran una planta de electrólisis que iba a tener inicialmente 60 megavatios, y que ahora alcanzará los 280, superando así a la otra instalación proyectada por Naturgy en Meirama, de 200 megavatios.
La eléctrica que dirige Francisco Reynés pretende reindustrializar, tanto en La Robla como en Meirama, los terrenos donde apagó sus centrales térmicas al abrigo de los convenios de transición justa; y Enagás, que comparte accionariado con Amancio Ortega en su división de hidrógeno verde, es la empresa que lidera el despliegue e implantación del H2Med. El proyecto de León lleva asociado la puesta en marcha de un plan de generación solar fotovoltaica compuesto por diversos parques situados en municipios aledaños, y cuya capacidad total ronda los 450 MWp que alimentarán de energía renovable la planta de hidrógeno.
El Ministerio para la Transición Ecológica, que estuvo representado en la presentación por la secretaria de Estado de Energía, Sara Aaegesen, lo calificó como un proyecto «estratégico» para «la futura red nacional del hidrógeno». Y Enagás Renovable señaló expresamente al H2Med como una de las claves para la decisión de incrementar la inversión en La Robla: «si bien en un inicio la capacidad máxima de la planta de producción de hidrógeno renovable era de 60 MW, la existencia de potenciales consumidores industriales en la zona y la cercanía a la futura red troncal de hidrogenoductos permitirá incrementar la potencia de electrolisis hasta 280 MW».
De Tudela Veguín a Arcelor
Inicialmente, el hidrógeno producido en La Robla tiene dos destinos previstos. Por un lado, la cementera que Tudela Veguín tiene en la localidad; y, por otro, las actuaciones de movilidad sostenible que impulsa Alsa para las vías interurbanas de la provincia. Pero hay otros dos grandes consumidores industriales como potenciales clientes del hidrógeno leonés. ArcelorMittal, con sus complejos siderúrgicos de Gijón y Avilés y que ya ha firmado un memorandum de entendimiento (MoU) con la alianza de Naturgy y Enagás Renovable (Robla Hub) ; y Fertiberia, con plantas en Valladolid y Avilés, de la que el Gobierno espera que siga los mismos pasos que el gigante del acero.
La planificación del Gobierno para la red española del hidrógeno establece un corredor norte-sur que conecta Huelva con Gijón pasando por León, el llamado Vía de la Plata, que contará con dos ramales para enlazar Avilés y el puerto de El Musel, de manera que esa producción pueda también exportarse con la regasificadora de Enagás como actor clave. Es a través de este corredor y sus ramales como la nueva planta podría abastecer a la industria pesada de Asturias.
La conexión gallega
Y es también el corredor al que quiere engancharse Galicia a través del hidroducto que plantea Reganosa entre A Coruña y Zamora, pero que en el primer proyecto presentado por el Gobierno en Bruselas no aparecía. Teresa Ribera dijo en su momento que esta infraestructura ya estaba contemplada en el H2Med, pero lo cierto es que hay elementos clave por dilucidar, como la prioridad que tenga su construcción en el conjunto del proyecto.
Desde Galicia se ha presionado al Gobierno para la construcción de este ramal y de una conexión con Portugal. El vicepresidente económico, Francisco Conde, llegó a acusar al Ejecutivo de pretender dejar a la comunidad como «una isla energética». Hasta finales de marzo hay un periodo clave en las consultas que mantenga Bruselas con España para saber cómo se incluye la conexión gallega, aunque las discrepancias con Francia respecto al diseño podrían complicar el proyecto, que debería extenderse también hasta Alemania.
Las relevantes iniciativas de hidrógeno presentadas en Galicia (Reganosa, EDP, Naturgy…), así como estar considerado un territorio muy favorable para la producción de este nuevo vector energético renovable, hacen que empresas y Xunta consideren fundamental la infraestructura.
El plan de Arcelor
Dos días después de la presentación de la planta de La Robla, la Comisión Europea autorizó una ayuda de 450 millones para ArcelorMittal, que pretende transformar sus complejos industriales asturianos hacia la producción de acero verde abastecido por hidrógeno renovable y gas de síntesis, procedente de gases metalúrgicos y residuos del propio proceso productivo. La ayuda desbloquea una inversión todavía no del todo cuantificada, pero que se estima que estará bastante por encima de los 1.000 millones de euros.
Para garantizarse el suministro, el gigante del acero ya formaba parte del consorcio HyDeal, en el que también están Enagás y Ferbiteria. Ahora suma un nuevo acuerdo con La Robla Hub, la planta impulsada por Naturgy y Enagás Renovable en León.
