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El ‘boom’ de San José en España: de la nueva fábrica de Estrella Galicia a los platós de Netflix

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En el año 2019, antes de que estallara la crisis sanitaria, el negocio internacional de Grupo Empresarial San José representaba el 46% de los ingresos de la compañía. La constructora de Jacinto Rey, autora de obras tan emblemáticas como el Louvre de Abu Dhabi, ha dado un vuelco a las cifras. El año pasado, el peso del mercado español alcanzó el 75%, aportando 818,1 millones a la cifra de negocio.

No es un desequilibrio puntual. La cartera de contratos del grupo también apunta a una creciente exposición al mercado doméstico. De los 2.481 millones que tenía en encargos pendientes de ejecutar a cierre del ejercicio pasado, 2.081 millones, el 84%, se ubican en España. La evolución de la cartera ha ido en el mismo sentido que la facturación, pues los encargos internacionales pasaron del 38% de 2019 al 16% de 2022.

La actividad de San José orbita con contundencia en torno a España, donde Hijos de Rivera le ha confiado la construcción de la plataforma 1 de la nueva fábrica de Estrella Galicia en el polígono industrial de Morás (Arteixo), o donde Netflix llamó a su puerta para los nuevos platós de su centro de producción en Madrid. La ampliación del Museo Nacional de Arte Romano de Mérida o el Edificio Fontán de la Cidade da Cultura de Santiago también forman parte de su hoja de servicios prestados, en los que cada vez gana más peso la obra residencial.

En su informe de gestión, San José explica que «con el fin de pandemia, muchos proyectos públicos se reactivaron y la llegada de los fondos europeos situó la licitación de obra pública en niveles pre-pandemia por un importe superior a los 30.000 millones de euros en España, lo que supuso un 27% más que en el ejercicio anterior, según datos facilitados por Seopan».

Aunque tiene actividad inmobiliaria, concesional y energética, la construcción es con diferencia el principal negocio del grupo, concentrando el 88,7% de los ingresos. Especialmente después del fracaso que supuso la adquisición de la inmobiliaria Parquesol, que endeudó sobremanera a la compañía en la antesala del crack del ladrillo y la obligó a una larga negociación con la banca para refinanciar y sobrevivir.

Un 57% más de ingresos en España

El incremento de la obra pública, la participación del 10% en Madrid Nuevo Norte (la antigua Operación Chamartín) o la creciente actividad en el sector residencial impulsan el romance de San José con España, a pesar de que comenzó su internacionalización mucho tiempo atrás, con buena implantación en Latinoamérica, Marruecos o Emiratos Árabes. En un contexto de inflación, que dispara los costes pero también la facturación, la compañía de Jacinto Rey ha superado los 1.000 millones de ingresos, algo que no sucedía desde que estalló la burbuja inmobiliaria.

El mercado español representó 818 millones, un incremento del 20,6% respecto al año anterior y de un 57% si se compara con el año previo a la pandemia, cuando ingresó en España 521 millones.

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