Coasa no levanta el vuelo: pierde 15 millones en tres años
Coasa repite números rojos. La empresa ourensana, filial de la vasca Aernnova y proveedora de gigantes como Airbus no ha logrado salir de zona de pérdidas pese a alzar el vuelo con su aumento del 43,2% en su facturación y acumula más de 15 millones en resultados negativos en los tres últimos años.
Y es que su cifra de negocio ha crecido prácticamente al mismo ritmo que, paradójicamente, el de sus propias pérdidas. Según se desprende de las cuentas anuales que la compañía ha depositado ante el Registro Mercantil de Ourense, sus ventas se elevaron desde los 20,6 hasta los 29,5 millones de euros, un repunte que no ha venido acompañado de una vuelta a los beneficios, sino más bien lo contrario.
No en vano, Componentes Aeronáuticos Coasa vio cómo sus números rojos se incrementaban desde los 2,2 millones de euros registrados en un 2021 de recuperación tras el Covid-19 hasta los 3,2 millones en 2022. Estas pérdidas se suman a las de 10,2 millones de euros que se anotó en un 2020 marcado por el estallido de la pandemia.
Sin embargo, tras el golpe del Covid-19, Coasa se prepara ya para regresar a sus cifras anteriores a esta crisis. «Después de un periodo de crisis en 2020 que afectó profundamente al sector aeronáutico, derivado por la Covid-19 y el cual dejó paralizado el tráfico aéreo, nos adentramos en un nuevo periodo de recuperación paulatina de la actividad para la sociedad, siendo 2022, un año de crecimiento», destaca la firma.
El reto de volver a los números de 2019
En este sentido, Coasa, que roza los 350 empleados, pone en valor el crecimiento de la facturación en un 43,2%, si bien esta se sitúa «casi un 20% por debajo de las cifras prepandemia«. Además de este golpe, la filial ourensana de Aernnova hace también repaso en su informe de gestión de los otros retos más inmediatos a los que se enfrenta el sector. A su juicio, su crisis «no ha sido coyuntural, ya que los cambios causados por la misma han abocado a la industria a un nuevo modelo empresarial». «Las empresas del sector han debido adaptarse, no solo a una importante reducción del tamaño del mercado, sino también a los profundos cambios producidos por el teletrabajo, el desarrollo tecnológico y la sostenibilidad medioambiental. Factores que, sin duda, han afectado a la forma de viajar para siempre», sostiene la compañía.
Coasa, que se define como «uno de los líderes mundiales en diseño y fabricación de empenajes en materiales compuestos y uno de los principales Tier -1 del sector de aeroestructuras con una fuerte presencia internacional» ve necesario apostar por abrirse un hueco en mercados emergentes como el de los UAV (vehículos aéreos no tripulados, como los drones).
El objetivo de la compañía es complementar una cartera de pedidos que, según revela, «ha empezado a recuperarse paulatinamente algo a lo largo de 2022» y en la cual figuran encargos de algunos de los principales grupos aeronáuticos. Es el caso de Airbus y Embraer. La compañía gallega trabaja como proveedora de componentes para los modelos A-320, A-330 y A-350 de la firma europea y para E1, E2 y KC390 de la empresa brasileña. Para esta última ha realizado, además, actividades de industrialización para un nuevo paquete, el Praetor 500-600.
«En el ejercicio 2023 se siguen notando de manera importante los impactos de la situación económica mundial actual con un tensionamiento de la cadena de suministros. Ante esto la sociedad intentará seguir adaptándose a los cambios y a las nuevas circunstancias del mercado impulsando la
industrialización de nuevos programas, continuando con los actuales y un esperado aumento de rate de la mayoría de ellos», avanza Coasa de cara a un 2023 marcado por el refuerzo de sus vínculos con Embraer.