Carmen Lence: «Es difícil tener una sostenibilidad ambiental sin una sostenibilidad económica»
“¿Qué pasaría si las vacas se extinguiesen?” Es la pregunta que formuló Carmen Lence en la jornada El poder de la acción individual en la creación de un futuro sostenible, primer evento de TEDx Praza de María Pita en A Coruña. La consejera delegada del mayor grupo lácteo gallego profundizó en su exposición en la importancia del medio rural para el bienestar de la sociedad y en la necesidad de tomar conciencia del papel que juega este sector en la sostenibilidad económica. Respondiendo a la pregunta del inicio, la directiva señaló que la extinción de las vacas supondría, entre otras cosas, que «dos tercios de la actividad económica agraria en Galicia desaparecerían».
«No somos conscientes de la importancia del rural». Se trata de un entorno que a día de hoy «representa el 85% del territorio de España y que está ocupado solo por el 17% de la población del país, es decir, que el 83% de los residentes españoles viven en el 15% del territorio nacional». Estas cifras reflejan la importancia de un entorno y unos sectores económicos a los que no siempre se les presta la atención que requieren, ya que son las personas que habitan y trabajan en el rural «los que producen la comida que alimenta al 100% de la población».
Según los cálculos de Carmen Lence, teniendo en cuenta que el volumen de población se está incrementando y que, «previsiblemente» para el año 2050 seremos más de 9.000 millones de personas en este mundo, «el rural hoy en día se debería estar preparando para poder producir un 75% más de comida», situación que dista mucho de la realidad tomando en consideración el alto volumen de despoblación con el que convive.
A todo esto, hay que sumar la importancia que tiene en el mantenimiento del territorio. «Si imaginamos un escenario en el que desapareciesen las vacas, también lo harían la ganadería extensiva, los pueblos y la gente, que son los que protegen los montes; ¿ qué pasa cuando no se cuidan? que nos encontramos con un montón de matorrales que son un combustible perfecto para los incendios», afirmó.
En este sentido, Carmen Lence hizo referencia a las provincias que han experimentado un vacío demográfico y que este verano vivieron en primera persona el devastador efecto de las llamas como Lugo, Ourense, Teruel o Zamora.
Retos del medio rural
«Es difícil tener una sostenibilidad ambiental sin tener una sostenibilidad económica» destacó la CEO del Grupo Lence al tiempo que hizo referencia a los dos grandes retos a los que tiene que hacer frente el medio rural: el relevo generacional y el éxodo de mujeres.
Según explicó, dos de cada tres personas que abandona este entorno son mujeres en edad fértil. «Si no hay mujeres no hay niños y si no hay niños no hay futuro», apuntó. La consejera delegada describió algunos de los muros a los que se enfrentan las mujeres a nivel profesional en el rural, como una mayor tasa de desempleo o peores condiciones laborales. A todo ello hay que sumar que «recae sobre sus espaldas el cuidado de los niños y de los mayores e invierten el triple de tiempo que sus compañeros en atender las tareas del hogar». Esto, según explica, trae como consecuencia que no tengan tiempo para ellas, para continuar formándose, ni para poder constituir asociaciones o sindicatos agrarios que velen por sus derechos. «Si no hay nadie que defienda sus derechos, quedan olvidados».
Lence ha incidido en que «no nos podemos permitir que la diferencia de género repercuta en la despoblación del rural» porque, el hecho de no ayudar a las mujeres, supone un freno para que su talento y potencial pueda ser desarrollado. «Estamos impidiendo que existan grandes profesionales y empresarias que generen un impacto económico y que puedan contribuir a la sostenibilidad y a la fijación de población».
Revertir esta situación y darle al rural el papel que merece es un ejercicio que debe asumir la sociedad. Por este motivo, ha apelado al «poder que tenemos todos nosotros para cambiar esta situación con el llamado efecto mariposa«. «Esas pequeñas decisiones cotidianas que parece que no tienen ninguna importancia, al final, la tienen»; con esta idea Lence apeló a nuestra «responsabilidad» como consumidores y a apostar por productos que hayan sido desarrollados en entornos y por compañías comprometidos con la sostenibilidad y con los derechos de los trabajadores que integran la cadena productiva. «Si no hacemos cosas diferentes cada vez tendremos menos gente en el rural», concluyó.
“Ideas dignas de ser difundidas”
TED –acrónimo de tecnología, entretenimiento y diseño– es una organización sin ánimo de lucro estadounidense centrada en «las ideas dignas de ser difundidas». En la jornada celebrada en el Árbore da Veira de A Coruña también participaron otros ponentes como Diego Calvo, vicepresidente segundo y conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes.
Al igual que Lence, Calvo inició su ponencia con una pregunta inicial: ¿somos todos iguales? El vicepresidente señaló el talento como el principal rasgo que nos diferencia del resto, entendido este como la aptitud o capacidad para el desempeño de algo. «La suma de todos esos talentos es lo que nos convierte en una sociedad mejor».
El vicepresidente centró su discurso en la inclusión ya que «en el desarrollo de las sociedades modernas tiene que ser algo fundamental». Utilizando el deporte como catalizador, el vicepresidente apuntó al necesario ejercicio que debemos hacer como sociedad para que «todo el mundo se sienta incluido».
También expusieron sus ponencias el periodista Fernando Lázaro Quintela, en la que explicó la estrecha relación que guardan el mensaje y el medio a través del que es distribuido y cómo en ocasiones el segundo puede prevalecer sobre el primero, y Rafael Gil, CEO de la consultora de eficiencia energética de Sawatco, que hizo un análisis de la etapa de transición energética que estamos viviendo haciendo hincapié en nuestra responsabilidad como individuos para fomentar un cambio que garantice la sostenibilidad del planeta.