Holaluz pierde 5 millones de euros por el lento despegue de su negocio fotovoltaico

Las instalaciones solares de la eléctrica catalana, su nueva apuesta, siguen sin ser rentable, mientras que la línea de gestión de contratos ya alcanza cifras positivas

Los socios principales de la comercializadora de energía Holaluz, Oriol Vila, Carlota Pi, y Ferrán Nogué. EFE/Enric Fontcuberta

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Holaluz se queda a las puertas de los beneficios. La comercializadora de energía catalana perdió 5,2 millones de euros en 2022, un 38,8% menos que en el ejercicio anterior, por el lento desarrollo de su negocio fotovoltaico, la principal apuesta de la empresa, que sigue reportando números negativos.

La eléctrica independiente divide su negocio en dos líneas, la gestión de contratos de energía y la instalación de placas solares propias destinadas al autoconsumo. Según las cuentas publicadas en el BME Growth, donde cotiza, Holaluz alcanzó al fin un beneficio neto de 4,9 millones de euros, tras perder 6 millones el año pasado, con la gestión de energía, mientras que el resultado final del negocio solar generó 10 millones en pérdidas, un 288% más que en el ejercicio pasado, arrastrando la cifra consolidada.

Las instalaciones solares dispararon su facturación un 469%, por encima de la media del sector, pero acabaron reportando números rojos por el incremento de los costes causado por la integración del negocio, en preparación a la consolidación de esta línea de trabajo. Por contra, la subida del precio de la luz a lo largo de 2022 generaron unos ingresos de más de 468 millones de dólares en la gestión energética, un 57% más, lo que, junto a una rebaja de los costes, le reportó un ebitda de 27,6 millones de euros, disparando la rentabilidad en un 1.625%.

En el consolidado del negocio, Holaluz ingresó casi 500 millones de euros el año, un 65% más que en el ejercicio pasado, impulsado por el precio de la energía y el incremento de 25 millones de dólares del negocio solar. Aun así, los números negativos de la línea fotovoltaica han empujado el global de la compañía a un ebitda negativo de apenas 200.000 euros.

Números negros en 2024

La empresa con sede en Barcelona espera alcanzar su primer beneficio neto en 2024, una vez consiga escalar el solar, tras invertir las ganancias obtenidas de la gestión energética a su despegue. Según las previsiones actualizadas publicadas este miércoles, la eléctrica prevé sumar entre 5.000 y 7.000 nuevas instalaciones solares este 2023, manteniendo todavía un ebitda negativo de entre 16 y 10 millones de euros. Será en 2024, cuando alcance las 10.000 insolaciones y supere el umbral de rentabilidad marcado entre las 800 y 1.000 instalaciones mensuales, que espera registrar beneficio bruto de 3 millones en su negocio solar.

En el primer trimestre del año, Holaluz finalizó 996 instalaciones, un 81% más que en el primer trimestre del año, pero un 21% menos respecto a la cifra alcanzada en el último trimestre de 2024 por «una ralentización de las ventas desde el mes de diciembre». La reducción del número de trabajos realizado ha disminuido la facturación trimestral en un 24% en comparación con los últimos meses de 2022, hasta dejarla en 9,2 millones de euros.

De enero a febrero, la compañía redujo su facturación trimestral en un 27% hasta los 203,4 millones de euros, por la bajada del precio de la energía que ha disminuido los ingresos por gestión energética en un 39%. El fin de la comercialización de gas anunciada el pasado octubre, por lo que perdió más de 70.000 clientes, también ha lastrado esta cifra, ya que en invierno supere suele experimentar su mejor rendimiento.

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