La Generalitat impulsa su proyecto de banco público con 1.300 millones

El Instiut Català de Finances ganó 26 millones de euros en 2022 y prevé disparar los beneficios en 2023 hasta los 42 millones

Pere Aragonès, acompañado de la consellera de Economía, Natalia Mas. EFE/Quique García

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La Generalitat dispara el presupuesto del Institut Català de Finances (ICF), el organismo público equiparable al Instituto de Crédito Oficial que el Govern quiere convertir desde hace tiempo en un banco público. El departamento de Economía ha inyectado 1.283 millones de euros en la entidad financiera, tras registrar unos beneficios de más de 26 millones de euros en 2022.

Esta es la cifra que figura en el proyecto de presupuestos que se ha hecho públicos, tras el acuerdo entre ERC y PSC. De esta forma, el ICF contará con un 50% más de los recursos que se le asignaron en 2022, pasando de tener disponibles 855 millones a los casi 1.300 de este año. La gran mayoría de esta suma se destinará a conceder préstamos y anticipos al sector público, unos 454 millones, y al sector privado, con 332,7 millones más.

Según expone el Govern en la memoria explicativa de las cuentas, la entidad pública recibirá esta fuerte inyección en comparación con los datos del año pasado por un aumento de su actividad, pero sobre todo como reflejo presupuestario de la reestructuración de la actividad entre el ICF y su sociedad hermana, también dependiente del departamento de Economía, el Instrument Financer per a Empresas Innovadores (IFEM). El ICF traspasará al IFEM la cartera crediticia de las líneas Eurocrédit y Crédito Covid-19, con un importe total de 430 millones y con una fuerte vinculación a la Generalitat.

El ICF aportará los recursos para que el IFEM pueda financiar la adquisición de la cartera y dotar a la entidad de plena operatividad mediante una aportación de capital proveniente de los fondos europeos Feder por valor de 141 millones, del traspaso del fondo de garantías del departamento de Economía referente a la línea Covid (112,5 millones), así como la concesión de un préstamo. Como resultado, IFEM generará un excedente de tesorería que deberá de servir de capacidad operativa.

Por encima de las previsiones

El incremento de presupuesto del ICF llega tras ganar 26,5 millones de euros en 2022, un millón menos que en 2021, pero una cifra mucho más alta en comparación con el beneficio de 10 millones previsto en las cuentas del año pasado. En los presupuestos de 2022, el antiguo conseller de Economía antes de la ruptura de la coalición con Junts, Jaume Giró, subestimó la capacidad recaudatoria de la entidad. Sus ingresos suben en la mayoría de las partidas que figuran en su balance de cuentas.

El incremento de los tipos permitió a la entidad ingresar 7 millones más de lo previsto en 2022 hasta los 49 millones, un 11% más que en 2021. Por otro lado, la facturación por dividendos llegó a los 3,8 millones y por comisiones se quedó en los 3, una cifra más parecida a las predicciones hechas a principios de año. En las estimaciones de 2022, Giró calculó un deterioro de sus activos de 27 millones de euros, el principal motivo que habría lastrado los beneficios. Finalmente, esta partida ha quedado en 15 millones, lo que ha permitido mantener las ganancias del año pasado.

Para 2023, la nueva consellera, Natalia Mas, espera impulsar el negocio de la sociedad pública hasta ganar 42 millones, un 61% más. La economista prevé disparar los ingresos por intereses hasta los 80 millones de euros y por dividendos hasta los 16, mientras mantiene los gastos relativamente estables.

El Govern insiste en convertirlo en banca pública

Esta semana, durante la presentación de las cuentas de su departamento en el Parlament, Mas aseguró que la Generalitat sigue interesada en conseguir la ficha bancaria para el ICF. Según la consellera, la solicitud está en trámite después que el Banco de España la desestimara hace un año por “una serie de cuestiones”, a lo que añadió que necesitará “seguir luchándolo fruente al Banco Central Europeo”, quien tendrá la última palabra. Sin embargo, en verano el consejero delegado de la entidad, Jordi Òliva, precisó que, por la actividad que llevan a cabo en la actualidad, «no necesitamos ficha bancaria».

El ICF copa el 12% del presupuesto dirigido a financiar las entidades de derecho público. Solo le supera el Institut Català de la Salut, con 3.741 millones de euros, un tercio del total que recibirán las sociedades públicas. En tercer lugar, la Generalitat dará más recursos al Centre de Telecomunicacions i Tecnologies de la Informació, con 854 millones, el 7,7%.

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