EDP refuerza su inversión en España con la preocupación de una demanda eléctrica a la baja

El gigante portugués de la energía tiene a España entre sus principales mercados, y así se refleja en sus inversiones, pero hay algunas cuestiones que cada vez preocupan más

EDP

Miguel Stilwell d’Andrade, CEO de EDP

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La portuguesa EDP mantiene unos fuertes lazos con España. Así, aunque en estos momentos ya no esté en el mercado residencial, su presencia en la producción de energía es muy importante, así como en el negocio regulado de la distribución. Sin embrago, la eléctrica lusa comparte las mismas preocupaciones que gran parte del sector.

Y motivos tiene. Sobre todo, porque su exposición es muy importante. Hace un par de años trascendió que la compañía tenía previsto invertir -hasta 2025- algo más de 2.000 M€. De esa cantidad, más de la mitad iría destinado al negocio renovable. Tanto para el autoconsumo, como la producción.

Pero eso ha ido a más. En primavera, de manera global, EDP anunció en la presentació de su ‘plan estratégico’ inversiones superiores a 20.000 M€ en los mercados donde opera. De ellos, el 35% irían destinados a Europa, lo que supone más de 7.000 M€, y si tenemos en cuenta que casi la mitad de sus proyectos eólicos están en España, todo hace indicar que la cifra es superior a la estimada hace un par de años.

Ante este escenario, en la reciente conferencia con analistas de EDPR Renovais, la división renovable del Grupo EDP, preguntaron de manera muy clara al CEO de la compañía, Miguel Stilwell d’Andrade, por la situación en España.

EDP quiere más, pero está intranquila

La respuesta es muy contundente: cree que España tiene un potencial enorme para sus intereses, sobre todo, en materia renovable. Añade que tras el ‘apagón’ del carbón, e, incluso, con el debate sobre la energía nuclear, asume que se trata de un mercado muy atractivo.

Aunque siempre hay un ‘pero’. Ese matiz incontrolable que las empresas tienen que asumir. Según Stilwell, el gran problema español ahora mismo es que la demanda eléctrica no ha recuperado los niveles esperados tras superar la pandemia del covid.

Asume que factores como la entrada del vehículo eléctrico deberá influir, pese el mensaje queda dicho. Además, se trata de un aviso que, desde hace meses, también preocupa al grueso de las empresas españoles. Un caso similar sucede con la demanda de gas natural, que no se ha recuperado de la crisis, y cada vez genera más dudas, en conjunto sobre la demanda energética española.

Interesada en invertir

En todo caso, el mercado español es prioritario para EDP. Tal y como avanzó ECONOMÍA DIGITAL hace unos meses, la compañía estudia posibles ampliaciones de su perímetro de negocio en suelo español.

En concreto, la compañía de origen portugués tiene el radar activo para sumar potencia renovable en su filial, EDP España o en la filial renovable del grupo, EDPR. Con ello se pretende aumentar su cartera de proyectos. Se trataría de solar fotovoltaica, en un mercado que se ha abierto a las operaciones corporativas ante la expectativa de una bajada de rentabilidad para los generadores de menor tamaño.

Fue durante una reunión con analistas con el CFO del Grupo EDP, Rui Teixeira, que fue CEO de EDP España, donde ha surgió la cuestión. Así, ante la preocupación que existe en el sector renovable, principalmente el fotovoltaico, sobre el hecho de que se han rebajado las expectativas en la captación de precios altos para la generación eléctrica, se han disparado las potenciales operaciones inorgánicas.

En este sentido, desde la energética portuguesa reconocen que esta situación de precio en el sector fotovoltaico español era algo predecible. De esta manera, aseguran en EDP que llevan un tiempo observando el mercado y, en su caso particular con respecto a su generación, hace tiempo que han incorporado estos condicionantes a su venta a largo plazo.

Pero en lo que respecta a la posible salida al mercado, en EDP mantienen que no están en una búsqueda activa de plantar solares o proyectos fotovoltaicos, pero que, lógicamente, están atentos a todas las oportunidades que surjan. Sobre todo, en aquellas plantes que presenten un precio atractivo. De esta forma, si económicamente encaja, están en disposición de salir al mercado.

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