Estas son las pensiones que caducan: la Seguridad Social lo explica
Hay pensiones que se otorgan periódicamente o de un solo pago, y que el cambio en alguno de los requisitos puede derivar en su caducidad o suspensión
Entre las pensiones que gestiona la Seguridad Social se encuentran las de jubilación, que son la mayoría; pero también las de viudedad y las de incapacidad permanente (que se otorgan por no poder trabajar por enfermedad o accidente).
A su vez, las pensiones se clasifican entre las contributivas y las no contributivas: las primeras son las que se perciben tras un período de cotización, y las segundas (con una menor cuantía) se entregan a personas que por diversas razones -como la vulnerabilidad económica- no cuentan han podido realizar aportes.
Y lo que poca gente sabe es que hay algunas pensiones que pueden caducar.
Estas son las pensiones que caducan: la Seguridad Social lo explica
Sí, hay pensiones que prescriben a los cinco años, pero esto no cuenta para las de jubilación, viudedad, orfandad y en favor de familiares.
Cuando sucede la prescripción, su plazo se cuenta desde el día siguiente al que tiene lugar el hecho causante.
Sin embargo, esas pensiones pueden verse interrumpidas, y llegado el caso, también se pueden perder.
Si cambian los requisitos por los que se otorgó una pensión a Seguridad Social puede suspenderla, y en todo caso, retirarla
Este conflicto se puede originar por una reclamación extrajudicial de un acreedor o de la Seguridad Social, o bien por un expediente de la Inspección de Trabajo.
Caducidad de las prestaciones anuales y periódicas
La Ley General de la Seguridad Social establece que el derecho a percibir prestaciones de un solo pago caduca al año, contando desde el día siguiente en que se notificó su aprobación.
O sea, si es que las prestaciones no se hicieron efectivas después de un año estas pueden caducar.
Y en el caso de las de pago periódico, el derecho a percibir cada mensualidad caduca al año de su respectivo vencimiento.
Por qué se puede quitar una pensión
Hay cuatro razones por las que la Seguridad Social puede suspender el pago de una pensión no contributiva.
Uno es superar el límite de ingresos que han sido fijados para cobrar una pensión no contributiva. Cabe recordar que los requisitos varían según la situación familiar del beneficiario, donde el límite más bajo se encuentra entre los pensionistas que conviven con un cónyuge o en unidades de convivencia con tres personas.
También se puede suspender y perder la pensión si es que el beneficiario no declaró los ingresos de la unidad de convivencia en los tres primeros meses del año.
Esta es una exigencia que demanda la administración para verificar que no se superen los límites económicos de los requisitos.
Cabe recordar que el receptor de una pensión tiene que informar de cualquier cambio de sus datos personales. Si es que estas modificaciones alternan los requisitos para obtener un subsidio, este se puede perder.
El caso de las investigaciones
Es posible, ya en un caso más grave, que la Seguridad Social emprenda una investigación y detecte irregularidades en la concesión de la pensión. En estos casos, no es extraño que este Instituto reclame a los pensionistas el dinero cobrado de forma indebida.
Hay casos en que una pensión que ha sido suspendida pueda recuperarse si se vuelven a cumplir con los requisitos; o cuando se informe debidamente de las condiciones familiares o de domicilio a la administración.