Pensión de orfandad: hasta qué edad se puede cobrar

La pensión de orfandad es una prestación económica que concede el Estado a los hijos de personas fallecidas y, en algunas ocasiones, a los aportados por su cónyuge. El objetivo de esta pensión, catalogada como de «supervivencia», es proteger la situación de necesidad económica que se genera en los hijos e hijas por el fallecimiento de uno o ambos progenitores.

Para recibir la pensión de orfandad conviene tener en cuenta que para solicitar el subsidio es necesario reunir una serie de condiciones, que también afectan a la edad y a la cuantía que finalmente percibirá el beneficiario.

Edad hasta la que se puede cobrar la pensión de orfandad

En este sentido, es necesario resaltar que podrán solicitar la pensión de orfandad los hijos menores de 21 años o mayores incapacitados en grado de incapacidad permanente absoluta o gran invalidez.

Asimismo, podrán acceder los descendientes con una edad comprendida entre los 21 años y los 25 años, cuando no efectúen trabajos por cuenta propia o ajena o, cuando realizándolos, los ingresos obtenidos sean inferiores al salario mínimo interprofesional que se fije en cada momento. Por lo tanto, la edad máxima para cobrar la pensión es a los 25 años.

Cuantía

Con la subida de las pensiones, un beneficiario de la pensión de orfandad, en 2023, percibe 239,45 euros, mientras que los menores con una discapacidad igual o superior al 65% cobran 470,89 euros. Sin embargo, en el caso de los beneficiarios con una orfandad absoluta, el importe asciende hasta los 795,63 euros para un solo beneficiario y hasta los 1.235 euros en el caso de que haya más de uno.

La pensión de orfandad se abona mensualmente, con dos pagas extraordinarias en los meses de junio y de noviembre, a excepción de las pensiones de accidente de trabajo y enfermedad profesional, que se reparten entre las doce mensualidades ordinarias