Los puertos de Barcelona y Tarragona presentan alegaciones contra el impuesto ambiental a grandes barcos
Los dos puertos catalanes aseguran que la aplicación de este impuesto supondrá la pérdida de competitividad y del tráfico portuario
Los puertos de Barcelona y Tarragona presentarán alegaciones contra el nuevo impuesto emisiones portuarias a grandes barcos aprobado por el Parlament de Catalunya. En concreto, el objetivo de este impuesto es gravar las emisiones de partículas de nitrógeno y óxido de nitrógeno que desprenden los grandes barcos como los cruceros.
Así lo han anunciado este jueves el presidente del Puerto de Barcelona, Lluís Salvadó, y el presidente del Port de Tarragona, Saül Garreta, en una rueda de prensa junto al consejero de Territorio de la Generalitat, Juli Fernàndez.
Pérdida de competitividad y de tráfico
En una reunión previa, uno de los temas tratados en el ámbito de la descarbonización ha sido la aplicación de dicho impuesto. Aunque ambas autoridades portuarias han coincidido en que es necesario transformar los puertos con el actual contexto de emergencia climática, han señalado que aplicar el impuesto propuesto por el Parlamento supondrá una pérdida de competitividad y de tráfico en los dos puertos catalanes.
Salvadó ha defendido que es necesario marcar unos «estándares a cumplir», aunque insiste en que estos deben «encontrar un equilibrio para evitar la pérdida de competitividad de los puertos». Por su parte, Garreta ha explicado que no presentarán alegaciones conjuntas y lo harán individualmente debido a que se tratan de puertos diferentes, con necesidades y problemas distintos.
Al mismo tiempo, los grandes puertos catalanes creen que “hay que dar al sector un tiempo para adaptarse a las circunstancias económicas derivadas de la aplicación del nuevo impuesto, al igual que se ha planteado en los cambios sobre las Emisiones del Sector Marítimo (ETS) por parte de las instituciones europeas”. También han propuesto establecer bonificaciones para aquellos barcos con sistemas de conexión eléctrica a muelle, con certificados ecológicos o que transportan gas licuado.