El Gobierno decreta un nuevo retraso en los pagos del Perte del automóvil
El Ministerio de Industria aún se encuentra revisando las garantías de los proyectos y no pagará las ayudas hasta marzo
El Perte del coche eléctrico y conectado sufrirá otro nuevo retraso. Pese a que la resolución definitiva es del pasado 21 de octubre no será hasta marzo cuando el gobierno efectúe el pago de las ayudas. La decisión del gobierno ha sido comunicada esta semana, según han explicado proveedores del automoción a Economía Digital .
Según la comunicación enviada a los consorcios y a la que ha tenido acceso este periódico, pese a que ya hace casi cuatro meses que se anunció la adjudicación del Perte del automóvil, el gobierno todavía se ha dedicado hasta esta semana a reevaluar «los expedientes para los que no se presentaron todas las garantías». En estos casos, «se abría un nuevo plazo para la aceptación y la presentación de garantías adicionales necesarias en aquellos expedientes en los que hubiese cambios».
Uno de los problemas de la primera edición del Perte del vehículo eléctrico fue la inclusión de pymes y los problemas que estas pequeñas y medianas empresas tuvieron para conseguir los avales que requería la convocatoria. La última, por ahora, reevaluación de las garantías a las que se refiere el Gobierno finalizará el próximo lunes 16 de enero.
«A partir de ahí, la resolución de la convocatoria se someterá a la fiscalización de la Intervención Delegada del Ministerio y se procederá a la resolución de concesión previsiblemente a finales del mes de enero», se asegura en el documento remitido a los consorcios creados para obtener ayudas del Perte. En este sentido, se asegura que «una vez resuelta la convocatoria, se realizará la tramitación de los pagos, lo que podría demorarse unas semanas más, previsiblemente hasta el mes de marzo».
Pese al dilatado plazo, se advierte que esta comunicación no es un compromiso. «No obstante, estas fechas son orientativas y se refieren a la previsión actual. En cualquier caso, según se vayan produciendo cambios, les iremos avisando», concluye el comunicado.
Tensión entre las pymes que apostaron por el Perte
Uno de los primeros temores que se desataron al inicio de la convocatoria del Perte por parte de las pymes fue, precisamente, el riesgo de que el gobierno pagara tarde. «Si te metes en un proyecto y tengo que invertir 500.000 euros en una nueva máquina, me puedo quedar por el camino hasta que reciba la ayuda y los proyectos del fabricante«, aseguró una pyme valenciana en la fase inicial de la selección del Perte que promovió Ford, que finalmente no se llevó a cabo. Pasado más de un año desde aquellos temores llegan los problemas para algunas de las pymes que se han lanzado en los proyectos del Perte.
«Este retraso es un verdadero desastre teniendo en cuenta que muchas pymes de los consorcios, el 40% de los socios en cada uno, han tenido que suscribir costosos avales a requerimiento del Ministerio desde finales del año pasado en previsión de que los fondos se abonarían a final de año», explican desde el teijdo empresarial de la automoción que está sufriendo el retraso en los pagos decretado por el Gobierno.
«Esto es un despropósito«, aseguran fuentes del sector ligadas al Perte de la automoción, que insisten en que la configuración del Perte ha estado repleto de errores como las exigencias de avales y garantías por parte de los participantes.
Otro de los condicionantes que marcó el bajo porcentaje de fondos adjudicados fue la exigencia de que se justificaran horas de ingeniería mientras que se limitaba de manera excesiva las inversiones en capex, es decir, la inversión o mantenimiento de bienes de físicos con los que desarrollar la actividad tradicional de las compañías. Estas inversiones son fundamentales para los proveedores tradicionales, que son los que mayor número de empleados tienen.
Esta limitación, tal y como han explicado proveedores de la automoción a este periódico, ha expulsado a las empresas medianas-grandes que no han podido ser tractoras de proyectos del Perte y que tampoco era pymes, por lo que se han quedado en tierra de nadie mientras veían como las empresas más pequeñas tenían problemas para cumplir con las condiciones de avales del Perte. Tal dimensión tiene este problema que, tal y como refleja la comunicación, aún esta semana están bloqueados los fondos europeos para el automóvil por un tema de garantías.