Este es el nuevo timo que alarma a las gasolineras
Las estaciones de servicio detectan un nuevo fraude dirigido a sus trabajadores
La digitalización y la irrupción de las nuevas tecnologías brinda a los usuarios un sinfín de ventajas, pero también trae consigo numerosos quebraderos de cabeza. Un claro ejemplo es la proliferación de nuevas modalidades de estafa, que van desde el smishing o el spoofing hasta el carding.
Uno de los establecimientos que se está convirtiendo en el blanco de un nuevo timo son las estaciones de servicio. Si bien los trabajadores de este tipo de puntos de venta están acostumbrados a ser víctimas de prácticas como llenar del depósito de combustible y marcharse sin pagar o la colocación de billetes falsos, está cogiendo fuerza una práctica delictiva novedosa.
¿En qué consiste la estafa?
A pesar de que gran parte de las estafas que tienen lugar en las gasolineras se orientan hacia los clientes que se desplazan a repostar, la nueva estafa está orientada a la plantilla de empleados de estos puntos de venta. Además, el elemento clave en torno al cual se articula la estafa es la posibilidad de pagar con el dispositivo móvil, según recoge el diario La Razón.
En primer lugar, el estafador se llena de carburante el tanque de gasolina del vehículo. Habitualmente, suele poner una cantidad que comporte un pago inferior a los 50 euros, puesto que no es necesario introducir el número PIN a la hora de abonar el importe.
El estafador graba previamente el sonido de confirmación de la operación en el móvil
Cuando llega el momento de pagar y el trabajador de la gasolinera prepara el datáfono para efectuar el cobro, el estafador coloca el dispositivo encima y espera a que suene el sonido que revela que la operación se ha formalizado con éxito.
Entonces, el delincuente, que ha grabado previamente este sonido característico lo reproduce, haciendo pensar el empleado de la estación de servicio que el pago se ha efectuado. Sin embargo, cuando el dependiente se da cuenta que no ha tenido lugar el pago, el cliente ya se ha marchado.
Por ese motivo, las autoridades aconsejan a los trabajadores de este tipo de establecimientos que no dejen marchar a los clientes antes de cerciorarse que la operación se ha podido realizar y se ha cobrado el repostaje.