Descubre la fórmula Greene: esto es lo que tienes que ahorrar para la jubilación según tu edad

Se trata de un método dividido en cuatro fases flexible y efectivo para ahorrar para la jubilación

El método se basa en dos variables principales: la edad y el salario anual. Foto Freepik

El método se basa en dos variables principales: la edad y el salario anual. Foto Freepik

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La fórmula Greene es un método de ahorro diseñado por la analista financiera y economista Kimmie Greene, que busca ayudar a las personas a tener un colchón económico suficiente para vivir de forma desahogada al llegar a la edad de jubilación. A diferencia de otros métodos de ahorro, la fórmula Greene es muy flexible y tolera cierta permisividad cuando se pasa por una época más complicada.

El método se basa en dos variables principales: la edad y el salario anual. Según la fórmula, el ahorro debe empezar lo antes posible, preferentemente cuando una persona accede al mercado laboral, a una edad comprendida entre los 20 y los 25 años. A partir de ese momento, se recomienda que se ahorre una cuarta parte de lo que se gana, es decir, que se destine el 75 % del salario bruto anual a los gastos y se sea capaz de ahorrar el 25 % restante.

¿Cómo se lleva a cabo?

El objetivo de la fórmula Greene es que una persona pueda ahorrar una cantidad determinada de dinero para su jubilación en función de su edad y de su salario anual. El método se divide en cuatro fases fundamentales:

  1. La primera fase consiste en llegar a los 30 años habiendo ahorrado el equivalente a un sueldo anual.
  2. A partir de los 30 años, hay que intentar mantener un ritmo constante de ahorro que esté supeditado a las distintas variaciones salariales que se vayan produciendo. Si se asciende profesionalmente y esto se ve reflejado en el salario, el ahorro deberá hacerse conforme a la nueva realidad financiera.
  3. La piedra angular de la fórmula es ahorrar al menos un salario anual bruto cada cinco años. Con 35 años, el trabajador debería tener ahorrado el doble de su sueldo anual. Con 40 años, los ahorros deberían ascender al triple del salario anual. A los 45 años, el trabajador debería haber ahorrado el cuádruple del salario anual. Y así, cada cinco años, se debería incrementar el ahorro con el equivalente a un salario anual, hasta llegar a la edad de la jubilación.
  4. El objetivo final es llegar a la edad de jubilación con el equivalente a ocho salarios anuales brutos en el banco.

La fórmula Greene se caracteriza por su flexibilidad. El ahorro se convierte en una rutina, lo que permite hacer frente a los contratiempos económicos que puedan surgir en la vida sin que la capacidad de ahorro se resienta a largo plazo. Además, la fórmula contempla ciertos contratiempos puntuales, pero presupone que estos se verán compensados en algún momento con un saldo positivo derivado de aumentos de sueldo, donaciones o incluso posibles herencias.

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